En plena COP20, el encuentro ambientalista más importante, surge nueva denuncia contra el legislador por Madre de Dios. Con autorización estatal, el ex nacionalista Amado Romero, llamado en un momento “Comeoro”, se hizo de dos concesiones mineras superpuestas a una forestal, de castaña.
Y si bien no las explota formalmente, hay ilegales que sí operan sin problemas. Osinfor evalúa sancionar y anular su permiso forestal, aunque mantendrá los derechos de explotación de las mineras que parecen ser su único interés.
Dánae Rivadeneyra
Utero.pe
Las comunidades que habitan la región Madre de Dios saben que pocos árboles han sido tan importantes en la vida de sus familias y ancestros como el árbol de castaña. Se cuenta que en 1569, tras un enfrentamiento con indígenas, el explorador español Álvarez Maldonado y sus hombres sobrevivieron días en medio de la espesura de la selva alimentándose solo de su fruto seco. La razón es que en estas tierras, antes que el oro fuera la adoración y perdición de los hombres, el castaño que puede llegar hasta 50 metros de altura y que ocupa más del 20% del territorio de MdD, era lo más apreciado.
Según el Sernanp (Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado),en Madre de Dios existen 1,301 concesiones forestales de castaña que son aprovechadas por las comunidades nativas y la población local. El congresista de Dignidad y Democracia, Eulogio Amado Romero Rodríguez, es el dueño de una de estas concesiones. Sobre su misma concesión de castaños, el ex integrante de la bancada nacionalista también tiene a su nombre una concesión minera que no explota pero que deja que mineros ilegales sí lo hagan, según un reciente informe de Osinfor (Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre).
TALIBÁN DE CONCESIONES
En setiembre del 2005, la entonces entidad forestal, Instituto Nacional de Recursos Naturales (INRENA), otorgó a Amado Romero Rodríguez más de mil hectáreas de bosques, ubicadas en el distrito de Laberinto, en Madre de Dios, para el aprovechamiento sostenible de la castaña. Como titular de esta concesión, Amado Romero debía asumir también el compromiso de utilizar de manera sostenible, al igual que los integrantes de las comunidades nativas, todos los árboles de castaña que se encontraban.
Sin embargo, lo que los funcionarios de INRENA desconocían es que, un año antes, en marzo de 2004, el mismo Amado Romero había solicitado formalmente al Ministerio de Energía y Minas, una concesión minera que se encontraba sobre la misma área que el bosque de castañas. Este ministerio había aceptado la petición. Así, en el 2005, Amado Romero ya era titular de dos concesiones, una forestal y otra minera, ubicadas en el mismo espacio, una superpuesta sobre la otra.
–”Eso no es un delito, la ley no prohíbe dos concesiones diferentes en la misma área –nos dijo Amado Romero en conversación telefónica, después de buscarlo por semanas.
Efectivamente, de acuerdo a la legislación forestal, la superposición de concesiones no es delito y sí procede. Actualmente, no existe un instrumento similar a un catastro único que pueda servir como guía en los casos de superposiciones. Esto genera una ausencia de comunicación entre el Ministerio de Agricultura y el de Energía y Minas (Minem), encargados de dar ambas autorizaciones.
Romero Rodríguez conoce bien esta situación. En el 2006, el ahora congresista volvió a formular un petitorio minero que también se superponía con su concesión de castañas. De igual manera, el Minem le dio la autorización y Romero se convirtió en el titular de Talibán I, la segunda concesión minera en la misma área.
Consultado por los motivos que lo llevaron a solicitar dos petitorios mineros sobre su concesión forestal, Amado Romero contestó:
–Porque son compatibles. Puede haber (minería) cuando tenga todos los términos de ley. Puede haber. Yo no he hecho en ningún momento minería ilegal (…) las castañas no están sembradas en toda la concesión. Hay partes donde no hay y de repente si dan ahí la autorización, se hace, ¿no?
Sin embargo el congresista se equivoca pues como afirma Josué Mercado, especialista de la Reserva Nacional de Tambopata, “es imposible que ambos derechos coexistan. La actividad forestal es incompatible con la minería”.
Aunque parezca increíble, el 74% de las áreas forestales concesionadas en lo que se conoce como el Anexo 1 de Madre de Dios está superpuesto con petitorios mineros. Esto es, en más de 240 mil hectáreas de bosques donde concesionarios de uno y otro derecho se encuentran enfrentados.
A pesar de esto, el caso del congresista Amado Romero es único.
–El caso del congresista es sui géneris. En todo este tiempo, es el único que hemos visto de este tipo –explica Rolando Navarro, presidente de Osinfor, el organismo que supervisa las concesiones forestales.
En todos los otros casos, se trata de terceros que por desconocimiento piden un área sin saber que ya estaba concesionada.
SOLO MINERÍA ILEGAL
El 31 de octubre del año pasado, después de más de seis horas de camino, los supervisores de Osinfor pudieron ingresar a la concesión del congresista. El panorama que encontraron en las más de mil hectáreas fue desconcertante.
De los 55 árboles de castaña que debían supervisar e inventariar, solo se toparon con dos. Este par no presentaba producción alguna y solo uno de ellos estaba registrado. La única actividad que se había desarrollado en los últimos tiempos era la minería.
Utero.Pe tuvo acceso al informe de Osinfor elaborado luego de la visita. “Durante el recorrido no se observó un campamento que fuera utilizado para el aprovechamiento de castaña, solo se observó un campamento desmantelado cerca de un área afectada por minería”, dice.
Los supervisores de Osinfor estimaron que el campamento minero mide aproximadamente siete hectáreas y que entre los espacios afectados se encuentra una colpa que presenta signos de excavación y está cubierta por arbustos secos, palos y restos de vegetación muerta debido a la minería. Las colpas son construcciones de arcilla natural y un lugar de reunión para aves y mamíferos. Estos espacios tienen influencia en sus ciclos de reproducción y, por tanto, en el equilibrio ecológico de la zona.
Las conclusiones del informe vuelven a confirmar el abandono que ha sufrido la concesión forestal en manos de Amado Romero:
“El concesionario, señor Eulogio Amado Romero Rodríguez, no viene cumpliendo con las actividades enmarcadas en los objetivos generales presentados, así como con el cumplimiento de las obligaciones contractuales adquiridas con el contrato de concesión ya que no realiza aprovechamiento de castaña, además de no haber realizado la apertura de linderos mediante trochas, ni la señalización de sus vértices”.
Romero Rodríguez se defiende aduciendo que las inspecciones de Osinfor están mal hechas y que la concesión de castañas sí ha sido aprovechada:
–”Nosotros tenemos trochas ahí, lo que pasa es que cuando ha ido Osinfor no ha ido por todos los lugares, ha ido por un lado nomás. Lo que pasa es que hay árboles que no producen, entonces no tiene sentido hacer trocha. Lo que pasa es que no están informando bien”, afirma.
Ahora, si bien el parlamentario Romero tiene permiso del Estado para explotar el suelo y el subsuelo (a pesar de la evidente incompatibilidad), lo que ha encontrado Osinfor en el terreno tiene todos los indicios de ser minería ilegal.
–Si es que ha habido afectación a un cuerpo de agua, estaríamos frente a un caso de minería ilegal –señala el especialista en temas mineros y ambientales César Ipenza, citando el Decreto Legislativo N0 1105.
En el registro fotográfico correspondiente al día de la inspección se puede observar que tanto una colpa como pequeñas lagunas han sido afectadas por las actividades mineras.
–Se presume que el responsable es el mismo congresista porque él es dueño de la concesión forestal y fue él quien también hizo los petitorios mineros que se superponen –dice Rolando Navarro, quien se cuida de adelantar opinión.
Osinfor aún no se ha pronunciado sobre el futuro de la concesión forestal de Amado Romero. El Procedimiento Administrativo Único iniciado en su contra se encuentra en proceso. Sin embargo, debido a los hallazgos lo más probable es que sea sancionado con la caducidad de la misma. Esta sanción no implicaría mayor cambio: anulado el permiso forestal, solo administraría las dos concesiones mineras que, como dicen las autoridades que lo investigan, “parecen ser su verdadero interés”.
AMADO ROMERO: “YO LA VERDAD ES QUE NO SÉ NADA DE MINERÍA ILEGAL”
El congresista de la República, ex miembro de la alianza Gana Perú, y ahora de la bancada Dignidad y Democracia Amado Romero Rodríguez afirma que él también ha denunciado las actividades de minería ilegal dentro de su concesión:
– Yo la verdad que no sé nada de minería ilegal. La verdad que yo también he denunciado porque no he autorizado a nadie para que haga actividades de minería dentro de la concesión castañera mientras no tenga los permisos de ley.
Sin embargo, Amado Romero no supo responder por qué no explota su concesión castañera y la abandona a su suerte.
–Usted sabe que por mi labor de parlamentario, yo no tengo tiempo para estar en eso, ya cuando salga del Congreso de la República me dedicaré a eso.
-Dígale a la persona que está encargando el tema que no direccione esas cosas en mi contra.
La República