La Autoridad Nacional del Agua (ANA), de reciente creación, tiene como principal reto optimizar y modernizar la gestión de los recursos hídricos del país, mejorando el uso del recurso que actualmente es malgastado por los usuarios.
Así lo sostuvo a ProActivo el representante de este organismo, Eduardo de la Cruz Reuche, quien agregó que todos los involucrados en esta problemática, como los ministerios, agricultores, gobiernos regionales y sector privado están en la obligación de apoyar y aportar planteamientos para lograr ese objetivo, bajo el liderazgo de la ANA.
Manejo de la demanda
El funcionario dijo que ante la actual escasez de agua, hay que saber manejar su oferta y demanda. Es decir, cuánta agua falta agua y cuánta se usa.
Dijo que para ello es necesario concientizar a la población con la nueva cultura del agua y la necesidad de su uso racional.
Asimismo, dijo que la ANA trata de sincerar las tarifas del servicio, pues cuando es gratis para algunos sectores, es difícil manejarlo, ya que necesitando uno, “agarra tres”.
Según añadió, Sedapal le corta el servicio a quienes no pagan el consumo, pero en los ríos “nadie corta el agua y la gente la sigue usando”.
Acotó que el consumo de agua debe ser racional en la agricultura, minería y entre el resto de usuarios, y que el cambio tiene que ir de la mano con la ley.
Ante el descenso del nivel del agua, sobre todo en la costa, dijo que se trata de llevar un adecuado control de la situación, aunque aclaró que en algunas zonas costeras hay ascenso, pues con obras hidráulicas se ha metido mucha agua superficial y hay problemas de drenaje, que perjudica los cultivos.
En zonas donde no hay aguas de trasvase, el agua sí está descendiendo como en Villacurí, Ica y Tacna, anotó.
Informó que en el caso de Villacurí, se trata de llevar las aguas de avenida del río Pisco, que durante tres meses se pierden en el mar, y que se van a infiltrar para recargar el acuífero del río seco del lugar.
“Lo hacemos en coordinación y convenio con el gobierno regional de Ica que aporta fondos para ese trabajo”, remarcó.
Resaltó que es más económico almacenar el agua en el subsuelo que en un reservorio tradicional donde el líquido queda expuesto al sol, se evapora y se contamina. En el subsuelo se conserva mejor, apuntó.
En otro momento, dijo que debería haber mayor conciencia ambiental entre los empresarios. “El empresario trata lógicamente de lucrar, pero básicamente tiene que tener claro que un mejor trato al cliente y a los recursos que forman su producto, lo va a beneficiar”, recalcó.
Ejemplificó que en Costa Rica, donde entre 1978 y el 2002 sus bosques se redujeron a un 20 por ciento en algunas zonas -por acción de las empresas hidroeléctricas- las autoridades advirtieron: “si sigues acá, en 10 años te quedas sin negocio”, por lo que dichas compañías aceptaron el reto y apoyaron la reforestación.
Agregó que la ANA -que inició funciones en febrero de este año- al tiempo que está abocada a desarrollar su organización interna, atiende todos los problemas relacionados al agua.
“Aquí, las quejas llegan todos los días y no puedes cerrar la puerta y decir ‘no voy a atender dos meses hasta que me organice’, ni hablar”, expresó.
La ANA -creada por Decreto Legislativo Nº 997- es el ente rector y máxima autoridad técnica normativa del Sistema Nacional de Recursos Hídricos.