Por primera vez los extranjeros pueden comprar y vender acciones en compañías cotizadas en la bolsa de valores de Arabia Saudita. Este es el último país del G20, el grupo de las mayores economías del mundo, que abre su mercado de valores a extranjeros.
Esto, dicen, podría transformar la región a medida que las compañías de Arabia Saudita se beneficien del escrutinio y la estrategia de sofisticados socios internacionales y que la inversión extranjera ayude al avance de reformas económicas en el país.
Pero habrá que tener paciencia. Los principales operadores de los mercados emergentes no están haciendo fila para comprar títulos.
Esto porque hay una multitud de regulaciones que determinan quién puede invertir en la apertura gradual del mayor mercado de valores de Medio Oriente. Estas parecen sumamente restrictivas. Por ahora sólo las instituciones que manejen US$5.000 millones de activos (o US$3.000 millones si el regulador hace una excepción) con un registro de inversión de cinco años tendrán luz verde.
Ningún inversor individual puede poseer más del 5% de una compañía y la propiedad extranjera total de una compañía no puede llegar a 49%. En total, sólo 10% de la participación en la bolsa de valores, llamada la Tadawul, puede ser propiedad de extranjeros.
MERCADO ATRACTIVO
A pesar de esto comprar en este mercado de acciones, que este año se ha incrementado 15%, es una posibilidad apetitosa para los inversores adecuados.
El valor del mercado de más de US$560.000 millones y sus volúmenes de negocio de unos US$2.400 millones supera los de las las bolsas de Sudáfrica, Rusia, Turquía y México. Un sector clave, el comercio minorista, está en auge debido al alto gasto del consumidor.
El gas subsidiado ha creado un sector petroquímico extremadamente competitivo y el sector bancario también parece altamente productivo con muchos consumidores que eligen bancos que cumplen con las regulaciones de la Sharia (ley islámica), con depósitos sin intereses, lo cual es una ventaja para los inversores.
Los inversores también apreciarán la fuerte economía saudita. En años recientes se han usado las altas ganancias del petróleo para borrar la deuda del país y crear sus reservas internacionales que alcanzan el 100% del PIB.
Hay una creciente clase media, los salarios continúan aumentando y el gasto en salud y educación sigue siendo una prioridad para el rey Salman. Los economistas vaticinan que el sector no pretrolero continuará su impresionante tasa de crecimiento, de alrededor de 5% este año.
BOLSA DE VALORES SAUDITA
► Se llama Tadawul.
►Opera de 11:00 a 15:30, se domingo a jueves.
► Registra 165 compañías que se cotizan en la bolsa.
► El mayor sector en índice de valores es el de bienes raíces (16%), seguido de pretroquímicos (15,4%) y bancos y servicios financieros (14%).
(Fuente: Informe Anual de la Tadawul, diciembre de 2014)
¿DISUASIVOS?
¿Por qué entonces algunos expertos se muestran escépticos sobre el nivel de demanda que habrá? Un administrador de cartera de valores basado en Medio Oriente me dijo que pensaba que inicialmente habrá menos de una docena de instituciones certificadas que invertirán.
Y el jefe de una compañía de administración de activos basado enArabia Saudita piensa que sólo la mitad de la oferta de US$50.000 millones para inversores extranjeros serán aceptados en los próximos dos años.
Una razón podría ser que, como consecuencia de los altos ingresos, las valoraciones de las compañías están a nivel alto para los inversores aunque esto podría justificarse potencialmente ofreciendo tasas de crecimiento altas.
Otro posible disuasivo es el requisito obligatorio de que el dinero debe presentarse anticipadamente y no dentro de los primeros dos días de la inversión, como es el caso en otros mercados de valores.
El mercado de Arabia Saudita también podría caer drásticamente a corto plazo como resultado del volátil precio del petróleo, aunque tiende a recuperarse rápidamente.
Durante los pasados 12 meses, los precios del petróleo han caído alrededor de 40% y el mercado de valores sólo ha retrocedido 2%. Pero hay que aclarar que muy pocos dudan que esta apertura sea una buena medida, sólo que tomará tiempo.
Mirando hacia el futuro, los intereses podrían dispararse en unos pocos años si los sauditas cambian su estatus de mercado fronterizo y se unen al índice preferido de los mercados emergentes, el Morgan Stanley Capital International (MSCI).
Mohieddine Kronfol, uno de los socios fundadores de Franklin Templeton Investments ME, cree que se ha iniciado un gran trayecto. Asegura que eventualmente esto podría conducir a un mercado de deudas revitalizado y también predice que se incrementará la presión de los inversores éticos del futuro para llevar a cabo reformas políticas y sociales.