Proyecto está valorizado en más de 47 millones de dólares.
En los talleres explican los componentes del proyecto a los ciudadanos de los distritos considerados como zona de influencia.
La minera Zafranal espera concluir con los talleres participativos esta semana. Estas reuniones informativas son parte del proceso seguido por la empresa para validar su Estudio de Impacto Ambiental (EIA).
Hugo Martínez, gerente de Comunicación del proyecto, indicó que estas audiencias se dan durante la formulación del EIA. Cuando concluyan, se volverán a realizar talleres informativos, donde detallarán el estudio. Senace pide que se hagan estas audiencias antes, durante y después de la presentación del EIA.
El proyecto minero se ubica entre las provincias de Caylloma y Castilla. Durante su explotación, se extraerá concentrado de cobre con bajo contenido de oro, mediante el proceso se flotación.
Durante estas audiencias se explican los componentes del proyecto a los ciudadanos de los distritos considerados como zona de influencia. Tanto ayer como el martes pasado, se realizaron protestas en contra del proyecto.
Los opositores a Zafranal tienen temor de que la actividad dañe la agricultura. En la zona de la mina, existen ojos de agua. Se teme que sean contaminados o desaparezcan, también que el río Majes se vea afectado, así como el balneario turístico de Chancharay.
Martínez indicó que, según estudios hídricos, estos ojos no llegan al balneario. Además, la principal fuente de agua del proyecto será el líquido que se encuentra en el subsuelo de Majes, producto de las filtraciones del proyecto Majes Siguas. El depósito de relaves se construirá en la quebrada Huacán.
Fuente: La República