ProActivo | El Banco Mundial (BM), recomienda atender la “pérdida sostenida de competitividad y sostenibilidad de las inversiones mineras en el Perú”, según informe elaborado por dicha entidad, sostuvo el Coordinador Regional de Latam de Industrias Extractivas del Banco Mundial (BM), Javier Aguilar.
El funcionario explicó que, en ese nivel, la pérdida de competitividad se comprende como la “falta de predictibilidad en la gestión de los instrumentos técnicos, ambientales y sociales para poder concretar los proyectos”.
Dijo que, desde la perspectiva de las regiones, existe una baja aceptación social de las importantes inversiones mineras en numerosos distritos y provincias, por lo que es sustancial atender ese problema mediante una política de Estado de mediano o largo plazo que dé orientación, y dirección “hacia qué y para qué es que se está impulsando esta minería”, más aún cuando el país está próximos a tener un nuevo gobierno.
“Desde nuestro punto de vista, la pregunta es cuánta inversión va ser posible concretar en los próximos 20 años de este pipeline importante de proyectos, pero también cómo se va a realizar esa inversión desde el punto de vista ambiental, social y la gobernanza”, agregó durante evento organizado en el marco de Perumin 35.
Observó además la importancia de no perder de vista los desafíos del cambio climático y cómo se incorporará en la matriz minera; así como el cambio tecnológico y las oportunidades que ofrece para impulsar una nueva trayectoria de desarrollo económico en las regiones mineras del Perú.
“Pensamos en ese sentido, que la industria minera puede con su desarrollo, contribuir a atender un muy importante problema en el Perú, que es el rezago de las regiones altoandinas y poder mejorar a través del desarrollo exitoso de sus proyectos y el reconocimiento y los liderazgos en las regiones; y de las oportunidades existentes a mejorar”, señaló el funcionario.
Pasivos mineros y cierres de mina
Aguilar precisó que un problema recurrente en la minería es que, en muchas regiones mineras, el primer contacto de las poblaciones no es con el proyecto, el inversionista o el explorador, sino con un pasivo ambiental minero, “una mina abandonada que está generando problemas porque operaron sin ningún tipo de control y de certificación ambiental”.
Subrayó que por ello es “esencial atender la remediación ambiental con inversiones importantes, especialmente de los pasivos de mayor riesgo”, para lograr la viabilidad de la industria minera.
El funcionario del Banco Mundial especificó que las poblaciones y regiones mineras requieren de la garantía de un cierre adecuado de las minas, para la rehabilitación. “Es importante que el marco regulatorio asegure las garantías financieras que exige el Estado para que el cierre esté acorde con los costos que van a implicar a futuro”, añadió.
Impacto macroeconómico que también sea para las regiones
Otro aspecto importante, manifestó, es contar con una visión territorial, lo cual permitirá optimizar la gestión minera para que su impacto socioeconómico ambiental adquiera una mayor magnitud con la consecuente mejor relación con las comunidades y regiones de su entorno.
“Es de enorme necesidad impulsar ese desarrollo territorial, pues hemos visto que en el Perú la minería ha tenido un impacto muy fuerte a nivel macroeconómico y en algunas regiones en donde desarrollan sus proyectos”, completó.
“Desde el punto de vista del BM, la minería representa una gran oportunidad para que las regiones locales rezagadas por décadas cambien favorablemente su trayectoria de desarrollo económico”, afirmó.
Manifestó que se requiere de una mejor gestión estatal bajo la interacción y la coordinación interministerial, porque que cada sector cumple su tarea y lo hace de la mejor manera posible, “pero en términos de gestión gubernamental no hay ninguna entidad que vele por una apropiada articulación de todas las partes para lograr un mejor resultado conjunto, por ejemplo, de la actividad minera”.
Exploraciones mineras
Trajo a colación que en los últimos 4 o 5 años, la inversión en exploración minera en el Perú perdió dinámica, con una caída notable y que esto tiene que ver con los instrumentos de gestión en relación a la exploración, establecidos por el BM.
“Nosotros en el organismo manejamos el principio de la proporcionalidad, y nos parece muy importante aplicar instrumentos de gestión ambiental y social que involucren un impacto favorable”, explicó.
Líneas de base ambiental en minería
Al respecto, sostuvo que el Perú podría hacer una racionalización ajustando el principio de proporcionalidad, para ver si efectivamente sus instrumentos de gestión ambiental están acordes con el tipo de impacto que se genera en la exploración minera.
“En gestión ambiental, la elaboración de las líneas de base es esencial porque es la referencia con la cual se comparan los impactos esperados de los distintos proyectos. Es la referencia, con los que el fiscalizador, como la OEFA, hace su control y monitoreo sobre los impactos y las medidas de mitigación acordadas en el plan de gestión ambiental de los proyectos mineros”, detalló.
Consideró que ahora podría ser el momento para que el Perú considere un enfoque diferente en la gestión de la línea de base ambiental, a cargo de SENACE y la OEFA “y debiera ser un instrumento en el cual la propia población tendría no solo la información debida sino la confianza sobre el control ambiental”.
Finalmente, Aguilar precisó que el informe realizado por el BM ha sido discutido con el ministro de Energía y Minas y el viceministro de Minas y próximamente será público también, como una propuesta que aporte al país.