(Bloomberg). Los inversionistas en bonos se vuelcan a Perú luego de que, de forma inesperada, su calificación recibiera un aumento de dos niveles. Para el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria y Barclays Plc, la buena racha en los bonos es exagerada, dado que la economía tiene el crecimiento más débil en cinco años.
Los pagarés del país con denominación en dólares han subido 1,1%, casi tres veces el incremento promedio de los mercados emergentes, desde que Moody’s Investors Service elevara la calificación de Perú de Baa2 a A3 el 2 de julio, indican datos que recopiló Bloomberg. El aumento de dos niveles, producto del superávit presupuestario del gobierno, es el primero que se otorga a un país en vías de desarrollo de grado de inversión desde 2006.
Si bien Moody’s estima que los proyectos de gasto en infraestructura del presidente Ollanta Humala contribuirán a que la economía de US$200.000 millones se recupere, la estratega de BBVA Carolina Ramírez dice que la declinante demanda china de los metales que constituyen la mitad de las exportaciones de Perúresultará un lastre en el mercado de bonos. Conforme el crecimiento se desacelera por cuarto año consecutivo, un aumento de los precios de los alimentos impulsa la inflación y la ha llevado por encima del objetivo del Banco Central de Reserva (BCR) en los últimos seis meses.
“Las perspectivas son de una desaceleración del crecimiento, y la inflación está por encima del objetivo”, dijo Ramírez, que estima que otras compañías calificadoras esperarán antes de seguir los pasos de Moody’s, en entrevista telefónica desde Bogotá. “Es probable que los inversiomistas se muestren más prudentes”.
La calificación peruana de Moody’s está ahora a la par de la mexicana y tres niveles por debajo de la chilena, el país más solvente de América Latina. Standard Poor’s y Fitch Ratings dan aPerú una calificación BBB+, un nivel por debajo de la de Moody’s, con perspectiva estable.
Los rendimientos de los bonos peruanos en dólares con vencimiento en 2019 han declinado 0,08 puntos porcentuales, a 2,25 por ciento, desde el aumento de calificación. Los valores rinden ahora 0,06 puntos porcentuales menos que los pagarés mexicanos de similar vencimiento. La brecha era de 0,11 puntos porcentuales el 3 de julio, la mayor desde octubre de 2013.
PERSPECTIVAS DE CRECIMIENTO
Luego de expandirse a un promedio de 6,3% en la última década, el ritmo más rápido de Sudamérica, el crecimiento de Perú se desacelerará a 5,3% este año, según la mediana de las estimaciones de una encuesta de Bloomberg entre economistas. Moody’s dijo en su declaración de julio que la expansión se recuperará a alrededor de 6% en 2015 y 2016.
“No somos tan optimistas como Moody’s en términos de perspectivas de crecimiento”, dijo Donato Guarino, un estratega de crédito de Barclays, en entrevista telefónica desde Nueva York. La ubicación de Perú en la categoría A llegó “mucho antes de lo esperado. Yo preferiría posicionarme en otros créditos de la región”, dijo.
AUMENTO INJUSTIFICADO
El 11 de junio, Humala propuso una ley para perdonar algunos impuestos atrasados, acelerar las obras públicas e impulsar la inversión en minería, hidrocarburos y telecomunicaciones.
Las medidas pueden ayudar a allanar el camino para mejoras adicionales, de acuerdo con el Ministerio de Finanzas.
“Las reformas estructurales se están implementando impulsarán el crecimiento económico, en un contexto de una gestión responsable y sostenible de las finanzas públicas, lo que se traducirá en una mejora de los diferentes indicadores que monitorean las agencias de calificación”, dijo el Ministerio de Finanzas en una respuesta por correo electrónico a preguntas.
Los rendimientos de los bonos 2019 de Perú cayó 1,35 puntos porcentuales desde Humala asumió el poder en julio de 2011. El costo de asegurar la deuda del país contra el impago por cinco años cayó 0,45 puntos porcentuales a 0,8 puntos porcentuales en el mismo periodo.
El incremento de dos niveles es “injustificada”, y las ganancias de los bonos peruanos son “excesivos”, dijo Jane Brauer, estratega de Bank of America Corp.
“Seguimos siendo bajista en el Perú”, dijo por teléfono desde Nueva York. “Nosotros no esperamos que el precio de mercado de los bonos en esa calidad.”
El Comercio