Las dudas acerca de la capacidad de los principales productores mundiales de petróleo de alcanzar un acuerdo para limitar el bombeo ha llevado a analistas a mantener la proyección de precios del crudo prácticamente sin cambios, mostró el lunes un sondeo de Reuters.
Los 35 analistas y economistas encuestados pronosticaron que los futuros del crudo Brent promediarán US$44,78 por barril este año y US$57,08 en 2017, comparado con la proyección de US$44,74 y US$57,28, respectivamente, arrojada por el sondeo del mes pasado. El Brent ha promediado los US$43,93 por barril en lo que va del año.
El sondeo proyectó que el precio del crudo liviano estadounidense promediará US$43,46 por barril en 2016 y US$55,22 en 2017. El petróleo WTI ha alcanzado un promedio de US$42,31 en lo que va del año.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que acordó el mes pasado en Argelia reducir la producción a un rango de entre 32,5 y 33,0 millones de barriles por día (bpd), tiene previsto delinear los detalles acerca de los recortes individuales en su reunión formal de noviembre.
Si bien hay una fuerte posibilidad de que Rusia, un gran productor que no integra el grupo, acuerde congelar la producción a sus actuales niveles máximos, otros productores fuera de la OPEP no se unirían al esfuerzo, e incluso aumentarían el bombeo, dijeron analistas.
No obstante, con Irak uniéndose a Irán, Libia y Nigeria en la búsqueda de exenciones a la reducción en el bombeo, los analistas son escépticos de que los miembros de la OPEP puedan llegar a un consenso.
Irak pidió ser excluido de las restricciones a la producción pactadas por la OPEP, argumentando que necesita el ingreso para combatir a Estado Islámico. Irán, Libia y Nigeria, cuyos bombeos se han visto afectados por sanciones o conflictos, también buscan eximirse de los recortes.
“La exclusión de naciones clave, además de la sensación negativa sobre el acuerdo de parte de los iraquíes, refuerzan la idea de que es poco probable un cambio concreto en el mercado físico”, dijo Jeffrey Quigley, director de mercados energéticos de Stratas Advisors.
Si bien hay una fuerte posibilidad de que Rusia, un gran productor que no integra el grupo, acuerde congelar la producción a sus actuales niveles máximos, otros productores fuera de la OPEP no se unirían al esfuerzo, e incluso aumentarían el bombeo, dijeron analistas.
Si el acuerdo no logra materializarse, los analistas anticipan una drástica liquidación que podría hundir los precios hasta US$40 por barril, y prevén que en ese caso el actual exceso de oferta permanezca hasta al menos mediados del 2017.
América Economía