“Modestamente me permito brindar cinco sugerencias de sentido común a los empresarios ante este bache de la economía peruana, para recordarles que no piensen que no hay que hacer nada sino más bien hay mucho por gestionar”, dijo Eduardo Torres-Llosa, gerente general del BBVA Continental.
1) Cuida el capital de trabajo
No se prevé una escasez de capital de trabajo en dólares o soles de los bancos para otorgar a los clientes, pero sí es cierto que las empresas querrán extender los periodos de pago. Por eso hay que cuidar el capital de trabajo porque los periodos de cobro y pago pueden fluctuar muy fuertemente, y tal vez las empresas no tengan bien preparado afrontar sus obligaciones.
2) Inversiones de largo plazo y/o capital
Si bien las empresas peruanas saben manejarse cuando bajan mucho sus ventas o márgenes de ganancias, cuando les va mal es porque están muy descalzada entre sus activos y pasivos.
“Muchas veces nuestros clientes tienen la tentación de hacer inversiones de largo plazo tomando deudas de corto plazo. Encuentran una buena inversión y la financian con sus líneas de capital de trabajo o con sus líneas de préstamos comerciales, y dicen: “después lo arreglo, es una buena oportunidad de inversión además es más barata porque siempre financiarse a largo plazo es más caro que financiarme a corto (plazo)”, dijo.
Pero eso no es una buena decisión en un contexto de ventas que no crecen tan fuertemente o que se estabilizan. Hay que calzar las inversiones de largo plazo con el fondeo de largo plazo. La clave es que hay que estar ordenados en términos de activos y pasivos.
3) Cuidar el calce de monedas.
#Tenemos un excelente BCR que elimina la voltaitlidad del tipo de cambio, pero hay que calzar monedas (tener ingresos y endeudarse en la misma moneda)”, señala.
Eso lo pueden hacer naturalmente o también a través de operaciones de cobertura que todos los bancos lo hacemos. Por eso no hay excusas, se trata de un tema de pura gestión financiera.
4) Consolidar relaciones con menos bancos
“Hay que trabajar con menos bancos. Con esta agresividad y liquidez tan boyante hemos visto en los últimos años que clientes nuestros trabajan con cinco, seis y hasta siete bancos, pero eso no es bueno al margen del banco del que se trate”, comenta.
Eso genera desorden. Es difícil para un director financiero llevar el control de tantas líneas. Conviene hacer la reflexión de si es bueno trabajar con tantos bancos.
5) No dejar de hacer inversiones estratégicas (en el corazón del negocio o core business)
“Hemos visto muchos clientes que han extraído parte de su capital, de sus líneas (de crédito) para hacer inversiones inmobiliarias. No digo que sea una mala decisión, pues dependerá del precio al que compren y al que vendan. Sin embargo, no hay nada mejor que invertir en el corazón del negocio”, afirma.
Hay que estar muy atentos porque la economía repuntará y se recuperará. Si nosotros bostezamos o pestañamos dos veces, vamos a perder mercado de cara a nuestro competidor que ahora está un poco más despierto.
En conclusión, Torres-Llosa recomendó a los empresas “manejar el corto y el largo plazo porque este proceso de desaceleración es transitorio y creemos que la economía del país tiene todo por delante para seguir creciendo”.
El Comercio