El Banco Central de Reserva del Perú (BCR) no ha comprado oro desde que obtuvo su autonomía en la década de 1990, según afirmó Carlos Gálvez, expresidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE). Esta declaración se da en respuesta a la propuesta del presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, quien sugirió que el Banco de la Nación (BN) compre oro a mineros en proceso de formalización.
Esta autonomía ha permitido que el BCR se enfoque en sus funciones principales, como la estabilidad monetaria y la gestión de reservas internacionales, sin verse influenciado por decisiones políticas. Sin embargo, esta independencia también ha significado que el BCR ya no participe en la compra de oro, una práctica común en el pasado.
La propuesta de Eduardo Salhuana y sus riesgos
Eduardo Salhuana, presidente del Congreso y miembro de Alianza para el Progreso, propuso que el Banco de la Nación compre oro a mineros informales y artesanales que estén inscritos en el Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo). Sin embargo, esta iniciativa ha sido cuestionada por el riesgo de adquirir oro de procedencia ilegal.
Gálvez señaló que el problema no radica en la compra de oro en sí, sino en la falta de garantías sobre su origen. “El problema es el origen del oro porque podría ser producción de la gente informal, pero no hay garantía de que no provenga de los mineros ilegales”, explicó. Además, comparó esta situación con la compra de repuestos para autos en zonas de dudosa procedencia, donde la trazabilidad es fundamental.
El Banco de la Nación y su falta de autonomía
A diferencia del BCR, el Banco de la Nación carece de autonomía, lo que lo hace vulnerable a decisiones políticas. Gálvez recordó que el BN ya ha enfrentado situaciones complicadas, como cuando el Gobierno lo obligó a facilitar préstamos a Petroperú, comprometiendo su patrimonio.
Si el BN entra en el negocio de la compra de oro, podría enfrentar riesgos financieros y operativos, especialmente si no se establece un sistema robusto de trazabilidad para garantizar el origen legal del metal precioso.
La necesidad de trazabilidad en la minería
Uno de los principales desafíos en la minería peruana es la falta de un sistema efectivo de trazabilidad del oro. Gálvez destacó que muchos mineros ilegales utilizan comprobantes del Reinfo de mineros informales para vender su producción, lo que dificulta la identificación del origen real del oro.
Para abordar este problema, es necesario implementar medidas que permitan rastrear el oro desde su extracción hasta su venta, asegurando que provenga de fuentes legales y formales. Esto no solo beneficiaría a los mineros que cumplen con las normativas, sino que también fortalecería la reputación del Perú como un productor responsable de oro.