Argentina y Bolivia renegociaron el contrato que ambos países mantienen de provisión de gas y acordaron una mayor flexibilidad estacional con la que el gobierno argentino espera ahorrar 460 millones de dólares en dos años.
La adenda al contrato vigente fue firmada por las empresas estatales boliviana YPFB y la argentina IEASA (antigua Enarsa) en una reunión en Santa Cruz de la Sierra en la que estuvieron presentes el ministro de Hidrocarburos boliviano, Luis Alberto Sánchez, y el secretario de Energía argentino, Gustavo Lopetegui.
En un comunicado, el Ejecutivo argentino explicó que bajo los nuevos términos recibirá menor cantidad de gas en los meses de verano, de menor consumo, en el periodo 2019-2020, y evitará el pago de las penalidades aceptadas por el gobierno anterior, dos puntos con los que espera ahorrarse los 460 millones de dólares.
El actual contrato con Bolivia fue firmado en 2006 y tiene vigencia hasta 2026; para este año, se prevé que la provisión de gas ascienda a unos 1.200 millones de dólares.
Como parte del nuevo acuerdo, Argentina ofreció a Bolivia un avión Pampa 3 (una unidad militar de entrenamiento y de ataque liviano) en caso de que la oferta de gas supere lo estipulado en el contrato en la época de mayor consumo.
Bajo el nuevo esquema de precios y cantidades, en los meses de verano (de enero a abril y de octubre a diciembre), YPBF entregará 11 millones de metros cúbicos de gas al día, en mayo y septiembre, 16 millones de metros cúbicos, y en los meses pico del invierno, entre junio y agosto, 18 millones de metros cúbicos diarios.
Fuente: EFE