ProActivo | Diego Macera, gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE), analiza la situación económica de la región Cajamarca y da alcances sobre la importancia de las exportaciones mineras para dicha región. Recomienda no bajar la guardia con respecto al Covid para la recuperación económica.
El relativo retroceso de la pandemia del COVID-19, por el descenso del número de contagios y fallecidos en las últimas semanas, trae cierta esperanza para la recuperación económica del Perú, pero aún no estamos en posición de cantar victoria. Así lo indicó Diego Macera, gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE).
“En la medida en que podamos tener esta variable bajo control, podremos tener una visión del mediano plazo más clara. En Cajamarca tuvimos una tercera ola durísima; sin embargo, ya se nota que en las últimas semanas hay una fuerte reducción en el número de casos y fallecidos. Esperemos que esta tendencia se mantenga y mientras seguir avanzando con el proceso de vacunación. En Cajamarca ya se tiene a una buena cantidad de la población con dos dosis y tenemos un buen porcentaje con tercera dosis”, afirmó Macera en declaraciones recogidas por ProActivo, en el marco de Rumbo a Perumin.
Minería en Cajamarca
El economista señaló que el crecimiento de Cajamarca al tercer trimestre ya iguala el nivel de producción del 2019. “Quizá el principal punto débil ha estado en la recuperación de la minería, con una contracción de casi un tercio con respecto al valor que se tenía en la pre pandemia que ha sido matizado con un avance fuerte del sector construcción”, dijo.
“En producción minera, que ha determinado el movimiento en el tercer trimestre, la caída todavía es dura y no estamos a niveles cercanos de pre pandemia. Para los trimestres del 2021 en comparación con el 2019, estamos en caída de entre 26% y 38% en cuanto a producción minera, donde la contracción del oro es lo que explica la mayor parte”, agregó.
Macera destacó la importancia de promover el avance de nuevos y más proyectos mineros que puedan servir de motores para la economía en Cajamarca. “Esto es indispensable para apalancarse del gran motor que significa la minería. Cajamarca es la región con la mayor cantidad de proyectos (mineros) por desarrollar, según el Ministerio de Energía y Minas. Eso es algo que de ninguna manera se puede desperdiciar, más aún en un contexto de precios altos como el que tenemos ahora”, dijo.
Asimismo, dijo que pese al incremento importante de los precios de los commodities, las exportaciones mineras de Cajamarca no han tenido la misma trayectoria. “Este es un tema que hay que mirar con muchísima atención y es algo que va a condicionar o podría ayudar significativamente en el desarrollo en los siguientes años. Es una variable de sumo interés”, indicó.
INCORE
Diego Macera dio datos de Cajamarca producto del ranking Índice de Competitividad Regional (INCORE 2021), elaborado por el IPE, que compara las dinámicas económicas y sociales de las 25 regiones de Perú, a través de seis pilares: entorno económico, infraestructura, salud, educación, laboral e instituciones. “En cinco de los seis pilares, Cajamarca aparece por debajo del promedio nacional”, indicó.
En entorno económico (puesto 18), es la segunda región con menor gasto del hogar y la quinta con menor PBI per cápita; rezagada en el acceso a créditos. En infraestructura (puesto 15); y en internet fija (puesto 23). En salud (puesto 21); y en educación (puesto 21), es la tercera región con la mayor tasa de analfabetismo y cuenta con la menor proporción de la población con acceso a educación secundaria a más. En laboral (puesto 23). En instituciones (puesto 8).
“El presupuesto de inversión pública de Cajamarca rompió récord en 2021. Los gobiernos locales y regional concentraron 9 de cada 10 soles presupuestados para inversión pública en el período 2009-2021. Sin embargo, presentaron un bajo nivel de ejecución incluso menor al promedio nacional. Entre los años 2020 y 2021, la inversión pública financiada por canon y regalías mineras tuvo un nivel de ejecución promedio de 60%. Entre los recursos que sí se ejecutaron, gran parte se destinó a asignaciones presupuestarias que no resultan en productos”, puntualizó.
Macera dijo que lo más importante es fortalecer los condicionantes de la inversión privada que es entre cuatro y cinco veces más que la inversión pública. “La inversión privada es indispensable para reactivar lo que para las familias es lo más importante, el empleo. Uno habla de PBI o déficit fiscal, cosas etéreas, pero a la mayoría le importa la situación laboral, lo que hay en el bolsillo”, señaló.
Finalmente, explicó que el empleo formal en Cajamarca está en niveles por encima de lo que se tenía en la pre pandemia, pero con desaceleración. “Si descomponemos por sectores vemos que hubo una caída en el sector servicios, pero que fue compensada con el crecimiento en puestos de trabajo en construcción y comercio. Hay que destacar que los puestos de trabajo informales siempre son más”, concluyó.