El 31 de marzo la calificadora Moody’s rebajó la calificación a la capacidad crediticia de México desde “estable” a “negativo”. La firma basó su decisión en un débil desempeño económico de México, un entorno externo difícil y la posibilidad de nuevas obligaciones en el caso de que el gobierno federal decidiera apoyar a Petróleos Mexicanos.
La empresa petrolea actualmente enfrenta problemas liquidez ha reconocido su director general José Antonio González Anaya. Ejemplo de la problemática financiera de la empresa es la pérdida por 521,607 millones de pesos durante el cuarto trimestre de 2015. Así el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, anunció la disposición de gobierno federal por ayudar a la empresa productiva del estado.
Dolores Ramón Correa, economista y experta en temas de política monetaria para Grupo Financiero Ve por Más comentó a Economíahoy.mx que la decisión de la Secretaría de Hacienda de no asignar un porcentaje de los remanentes del Banco de México a Petróleos Mexicanos fue una buena decisión sobre todo después de que la calificadora Moody’s expuso el riesgo de que el gobierno federal apoyara a la empresa, y al mismo tiempo de que la petrolera levante más financiamiento en los mercados internacionales. En otras palabras que aumente su nivel de endeudamiento. “Vemos positivo que Hacienda no haya transferido a Pemex los remanentes”.
La secretaría de Hacienda informó que el 70% de los ingresos remanentes se destinarán a la recompra de deuda, es decir a bajar la deuda pública. Esta decisión tendrá un efecto inmediato sobre la meta de déficit público que llegar a una tasa cero en 2017. “Reducir el déficit es positivo para México. Las acciones están en línea con un déficit cero expuesto en los precriterios del Presupuesto de Egresos 2017”.
En opinión de la experta de Ve por Más, México tienen a favor la estabilidad de sus fundamentales económicos comparado con otros países de América Latina, de este modo, la decisión que tomó la Secretaría de Hacienda sitúa al país en una mejor posición.
De acuerdo a la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH), el 70% de los remanentes que recibe la dependencia a cargo de Luis Videgaray por parte del Banco de México estarán asignados a reducir la deuda pública y el restante 30% a capitalizar el Fondo de Estabilización de Ingresos Petroleros.
Es decir, la mayor parte estará asignada al pago de la deuda, lo que reducirá el gasto programable en el presente ejercicio 2016.
Fuente: Diario am.com.mx