Jorge Meza, Director General de Operaciones de Southern
ProActivo
Perú continúa siendo uno de los países más atractivos para la inversión minera a nivel mundial. Sin duda cuenta con un potencial similar o mayor a países que lideran el ranking de productores, lo que constituye un alentador panorama que el Estado debe capitalizar en favor del desarrollo.
Así lo dio conocer el Director General de Operaciones de Southern Peru. Ing. Jorge Meza Viveros durante la charla magistral denominada “Impacto económico-social de la minería en el sur del Perú”; que ofreció en el marco del IV Congreso Internacional Sur Minero organizado por la Universidad Nacional de Moquegua y Southern Peru.
Meza Viveros remarcó la importancia que reviste la inversión privada y el sector minero en el desarrollo del país. La última década esta actividad productiva generó 187,150 empleos directos y más de un millón de empleos indirectos.
Entre 2001 y 2017 el PBI en Perú aumentó más de cuatro veces, pasando de 51 mil millones a 215 mil millones. Las reservas internacionales alcanzaron récords históricos, las exportaciones se incrementaron sustancialmente, multiplicándose por más de seis entre el 2001 y 2017, siendo buena parte de ellos, las exportaciones mineras.
El riesgo país se redujo permitiendo a Perú ser un país con grado de inversión. Tales indicadores contribuyeron a que la pobreza a nivel nacional se redujera en 31 puntos porcentuales.
Actualmente en Perú, la gran minería tiene presencia en 17 regiones y representa el 60% de las exportaciones peruanas, el 13% de la inversión privada, el 10% del PBI y el 21% del Impuesto a la Renta, regalías e impuestos especiales (en los últimos 10 años).
Bajo este revelador panorama, el Ing. Meza Viveros destacó la necesidad de poner en marcha los proyectos mineros pendientes. Actualmente hay seis proyectos con EIA aprobado y licencia de construcción. Estos son: Quellaveco (Moquegua), Ollachea (Puno), Conga (Cajamarca), Crespo (Cusco), Shauindo (Cajamarca), Shouxin (Ica) y Tambomayo (Arequipa).
Asimismo, cuenta con proyectos con Estudios de Impacto Ambiental aprobados pero sin licencia de construcción. Se trata de: Tía María (Arequipa), Fosfatos (Piura), Pampa de Pongo (Arequipa), Corani (Puno), Pukaqaqa (Huancavelica), San Luis (Ancash), Ariana (Junín) y magistral (Ancash).
Ponerlos en marcha es un importante desafío para el Estado, como también una gran oportunidad para dinamizar la economía del país, dijo Meza Viveros tras recordar que por cada empleo directo que genera la minería, se crean más de seis empleos indirectos, se genera riqueza y se contribuye a mejorar las condiciones de vida de la población.
De hecho las regiones del país con operaciones mineras en marcha, son precisamente las que registran menores índices de pobreza, menores tasas de analfabetismo, mejores niveles de ingreso per cápita, mejor calidad educativa, bienestar y mayor acceso a la tecnología; en resumen, mayor desarrollo. Es el caso de Moquegua, Tacna y Arequipa.
Sin embargo, existen aún factores que frenan la inversión minera, entre ellos: la incertidumbre jurídica, social, política, la incertidumbre en leyes laborales, la corrupción, las legislaciones ambientales incoherentes y los costos de energía y agua, elevados.
Perú tiene en cartera 48 proyectos por un monto de 51 mil 102 millones de dólares que deberían ejecutarse en el corto y mediano plazo. En el caso de Southern Peru, la compañía tiene proyectado invertir poco más de 5 mil 750 millones de dólares hasta el 2021 en proyectos como: Tía María (1,250 mlls), Los Chancas (1,300 mlls.), Michiquillay (1,400 mlls.); y aunque no está aún decidido, se encuentra en estudio una probable expansión de la Fundición Ilo (1,250 mlls.) y la expansión Cuajone (500 mlls.).
OTRAS CIFRAS
- S/ 51 mil millones en impuestos y regalías generó el sector minero los últimos 10 años. Esto representa el 21% del total de impuestos generados en el país.
- S/ 39 mil millones se transfirieron los últimos 10 años a los gobiernos regionales y locales en canon y regalías.