ProActivo | En los últimos 10 años, el manejo de los temas sociales en el sector minero del Perú ha tenido una mejora notable, por tratarse de un tema clave en la gestión de las empresas del sector orientada a evitar los conflictos con las comunidades de su entorno, sostuvo Alan Dabbs, fundador y CEO de Social Capital Group, consultora especializada en gestión de oportunidades y riesgos sociales.
“Cada vez, las empresas tienen más gente dedicada a este tema, con mayor nivel de capacitación, habilidad y planificación. Entonces hay una mejora en la gestión social a la altura de los retos que tiene la minería en este campo”, agregó el experto en entrevista con ProActivo.
Afirmó que en el Perú, una empresa minera con buena gestión social es comparable, igual o mejor que otra cualquiera a nivel mundial, considerando que la existencia de tanta actividad en operaciones y proyectos, “está permitiendo que haya un conocimiento creciente acá en ese rubro”.
Estado no puede resolver conflictos y empresas deben asumirlo
El consultor apuntó que en el Perú y en otros países, el Estado no tiene mucha capacidad para ayudar a resolver un conflicto mayor, una vez que haya estallado, pues carece del apoyo del gobierno regional y local, por lo general. “Por eso, siempre le estamos diciendo a las empresas mineras: miren, tienen que gestionar y manejar más los temas sociales”, acotó.
Dijo que como el Estado necesariamente no tiene la capacidad para resolver un conflicto, la empresa minera tiene que irse preparado para asumir ese reto por su cuenta, no solo en Perú, sino en cualquier otro país, “No noto que los políticos peruanos levanten la mano para decir ‘sí’ a la minería, cuando se tratan de conflictos. No hay un consenso dentro de los partidos para apoyar al sector en estos casos, pero es una circunstancia que también se presenta en otros lados”, detalló.
Subrayó que cuando surge un problema en un área local y hay un rechazo contra la minería “nadie quiere levantar su mano y hacer causa en favor de un gran proyecto”.
La minería responsable abre puertas
Dabbs remarcó que cuando la minería responsable logra que un proyecto tenga apoyo para su desarrollo, es porque ha generado un diálogo transparente en torno a los alcances de su iniciativa, y lo cual ha permitido ganarse la confianza de las comunidades de su alrededor.
“Ha logrado que las comunidades, que los vecinos, que los pueblitos quieran el proyecto”, expresó.
Refirió que Social Capital Group ha trabajado en 100 proyectos de exploración en diversos países, ayudando en las relaciones comunitarias, y ha permitido convencer en muchos casos que más del 80% de la gente le abra las puertas a esos prospectos, explicándoles con claridad y transparencia los beneficios que recibirán.
“Del resto de la gente, menos de un 15% no quiere el proyecto porque tiene otra mirada, o porque otra empresa en el pasado no cumplió con sus ofrecimientos”, acotó.
Puntualizó que el diálogo e identificación de las necesidades de cada interlocutor en forma temprana y oportuna, evita casi siempre la crisis, y más cuando los proyectos son de gran escala.
Integrar acción conjunta ante conflictos
El experto consideró que es de vital relevancia que el Estado cuente con una estrategia clara, un objetivo de cómo dialogar con la población conflictiva.
“Mientras, las empresas deben tener los asuntos ordenados para poder integrarse a las acciones del Estado, y comunicar bien la realidad de sus ofrecimientos y no perder la confianza de la comunidad”, citó.
En tal sentido, manifestó que podría pasar que una empresa comunica que todo está bien, pero cuando el Estado llega para apoyar, no es así, “por lo que el mismo Estado puede cuestionar su gestión”.
Conflictos y pasado
Dabbs indicó que el Perú es un país de oportunidad para los mineros, es un denominado “World class”, por su gran potencial de recursos. “Pero el tema, es que las empresas no solo tienen que manejar el aspecto financiero y operacional, sino asegurar el tema social y tener una estrategia para hacerlo bien”, dijo.
“Por ejemplo, creo que en general no hay problemas para iniciar los trabajos de exploración (por el lado social).
El problema radica que en ciertos casos se produce el rechazo de la población por hechos pasados, históricos, cometidos por otras empresas”, trajo a colación.
Al respecto, aconsejó que cuando se compra un proyecto, se tiene que ver si tiene un pasivo social debido al desempeño empresarial anterior, y a partir de ahí generar una estrategia para reconstruir la confianza con la comunidad del entorno. Comentó que de alguna forma los geólogos y mineros se centralizan solo en la idea de un descubrimiento grande.
“Pero también tienen que pensar en el objetivo social, considerando que este factor representará su “puerta abierta” para dar el próximo paso, y con lo cual permitirá más exploraciones de otros proyectos”, estimó.
Recordó que en Guatemala su consultora trabajó un proyecto de exploración con una empresa junior y que previamente se hizo una eficiente estrategia social, y con lo cual se logró el respaldo de todo un pueblo, “y la propia comunidad colaboraba en los trabajos”.
La gestión social es un valor agregado
Dabbs destacó que el desarrollo de una eficiente gestión social representa un valor agregado para la industria minera nacional. “Pasan 1000 razones para que algunos proyectos demoren en salir, pero el tema social puede ser el factor principal, por lo que su mejor manejo aumenta la posibilidad de que un proyecto no solo pueda ser financiado, sino construido a tiempo”, aseguró. Anotó que en el Perú, el Estado tiene claro la importancia que tiene la minería en la economía del país, pero quiere una minería responsable socialmente, que contribuya con el desarrollo a nivel local, regional y nacional. “En algunos otros países (mineros), el Estado no está convencido de si apoya o no a la minería, pero aquí, sí ”, destacó.