En 2010, ocurrió un desastre en la mina San José, ubicada en la región de Atacama, Chile, donde 33 mineros quedaron atrapados a 720 metros de profundidad debido a un derrumbe. Tras sobrevivir durante más de dos meses bajo tierra, fueron rescatados exitosamente en una operación que conmovió al mundo y fue seguida en vivo por más de mil millones de personas.
Después del rescate, 31 de los 33 mineros demandaron al Estado de Chile por daño moral, alegando que organismos estatales como el Servicio Nacional de Geología y Minera (Sernageomin) y la Dirección del Trabajo (DT) no actuaron a tiempo para evitar el accidente, incumpliendo su deber de fiscalizar las condiciones de seguridad y laborales de la mina. La Corte Suprema chilena rechazó un recurso de casación presentado por el Consejo de Defensa del Estado (CDE), confirmando una sentencia que condenaba al fisco a indemnizar a los mineros. Cada uno de ellos recibirá aproximadamente 48.000 dólares.
El derrumbe ocurrió el 5 de agosto de 2010 y mantuvo en vilo a los familiares, amigos y autoridades durante dos semanas. Finalmente, se estableció contacto con los mineros atrapados y se confirmó que estaban vivos y en buen estado. La operación de rescate, liderada por el ingeniero André Sougarret y coordinada por el entonces ministro de Minería, Laurence Golborne, concluyó con éxito el 13 de octubre, utilizando la cápsula Fénix para traer a los mineros de regreso a la superficie.
El caso de los 33 mineros atrapados se convirtió en un ejemplo de supervivencia y esperanza ante desastres similares en el mundo. También fue fuente de inspiración para la película “The 33” (Los 33), estrenada en 2015 y protagonizada por reconocidos actores como Antonio Banderas, Juliette Binoche, Rodrigo Santoro y Mario Casas.
La resolución de la Corte Suprema señaló que el Estado de Chile incurrió en falta de servicio al no prevenir el desastre al permitir la operación de la mina San José sin tomar las medidas de precaución y fiscalización necesarias. Con esta decisión judicial, se establece una indemnización para los mineros que esperan obtener justicia por los traumáticos eventos que vivieron durante su largo confinamiento en la mina.