El costo por limpiar lugares contaminados es mucho mayor que los desafíos de prevención que pueden abordar los países en desarrollo, consideró Marcos Orellana, relator especial sobre las implicancias para los derechos humanos de la gestión y eliminación ecológicamente racionales de las sustancias y los desechos peligrosos de las Naciones Unidas.
Fue el viernes 25 durante la sesión de la Comisión investigadora en atención a niños y familias afectadas por metales tóxicos, que preside el congresista Manuel García Correa (APP), donde expuso sobre los desechos peligrosos en el ámbito del derecho internacional.
Orellana señaló que la trayectoria de industrialización de muchos países que tienen problemas de contaminación se están enfrentando por problemas tóxicos.
“Hay contaminación por plásticos, por ciertas industrias difíciles de controlar, deforestación, petróleo e hidrocarburos. Es una intoxicación del planeta que empieza a amenazar una zona, siendo un sacrificio para la humanidad”, detalló.
Dijo que los derechos que se ven afectados por presencia de sustancias peligrosas son importantes de analizar. “El costo por limpiar lugares contaminados es mucho mayor que los desafíos de prevención que pueden abordar países en desarrollo”, insistió.
A su turno, el parlamentario José Jerí Oré (SP) solicitó insumos para mejorar la labor de ese grupo de trabajo a fin de que, desde su experiencia internacional, pueda ayudar a la problemática de nuestro país.
El titular del grupo de trabajo señaló que el objetivo de esta investigación es que el Poder Ejecutivo tome medidas correctivas y que en un futuro no se vuelva a cometer excesos en ello.
Dijo que se tiene programado visitar Cerro de Pasco y otros lugares donde hay presencia de plomo.
La contaminación por metales se tiene que ver con criterios de contenido, concentración, geodisponibildad, biodisponibilifad en términos de afectación a la salud de las personas animales, agua de ríos, lagunas, mar y aire.