En consorcio con ICSK, se encargará de las obras civiles y el montaje del sistema de flotación de la planta concentradora de Quebrada Blanca Fase 2.
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La empresa Cosapi, en consorcio con la compañía chilena Ingeniería y Construcción Sigdo Koppers (ICSK), lograron adjudicarse las obras civiles y el montaje del sistema de flotación a espesadores del Proyecto de Ampliación de la Planta Concentradora de Quebrada Blanca Fase 2 (QB2).
QB2 está ubicada en Tarapacá y se espera una producción de más de 300,000 toneladas de equivalente de cobre por año durante los primeros cinco años completos de vida útil de la mina. QB2 estará entre los 20 principales productores mundiales de cobre. Teck Resources Limited (Teck) posee una participación indirecta del 60% en la Compañía Minera Teck Quebrada Blanca SA (QBSA) que posee QB2. Sumitomo Metal Mining Co., Ltd. y Sumitomo Corporation juntos tienen una participación indirecta colectiva del 30% en QBSA. ENAMI, un organismo estatal chileno, tiene un 10% de participación no financiera en QBSA.
El alcance del proyecto en el que participa Cosapi consiste en obras civiles e instalación eletromecánica de las áreas de flotación, espesadores, remolienda, planta de molibdeno e instalación de sistema de tuberías de servicios, entre otros.
Ubicada a 4,400 metros sobre el nivel del mar, a 240 kilómetros al sureste de Iquique, en la región Tarapacá, las obras de ampliación de Quebrada Blanca Fase 2 están a cargo de Bechtel, empresa especializada a nivel mundial en ingeniería y construcción de proyectos mineros.
Para Cosapi estas obras representan su retorno a los proyectos mineros en Chile, por lo que tiene gran trascendencia para la compañía peruana. El inicio de las obras es en mayo de este año con un plazo de 24 meses; se crearán aproximadamente 800 puestos de trabajo. Además de la fuerza laboral local, el proyecto también incluirá ingenieros peruanos y profesionales especializados.