¿Quieres iniciarte en el mundo de la inversión y no sabes cómo dar el primer pie? ¿Te estás debatiendo entre si apostar por acciones o darles una oportunidad a las criptomonedas? Este artículo es para ti. Te ayudaremos a encontrar una solución de acuerdo con tus necesidades.
En primer lugar, es preciso que sepas que las criptomonedas como invertir en criptomonedas Perú son divisas digitales que se basan en tecnología blockchain. No dependen de gobierno o entidad financiera alguno pues cuentan con técnicas criptográficas que permiten verificar las transacciones sin un intermediario central, lo que resulta una ventaja bastante atractiva. Sin embargo, sus precios son volátiles y esto representa un riesgo.
Si estás decidido a dar el paso y enfrentar las posibilidades de pérdidas es preciso que te familiarices con los términos básicos y estudies el mercado, además de prestar atención a las opiniones de los especialistas.
Actualmente los tipos de criptomonedas más conocidas que hay son: Bitcoin, Ether (Ethereum), Tether, Solana y Dogecoin.
¿De qué trata el mundo de las acciones?
Una acción representa una porción de una empresa. Cuando invertimos estamos volviéndonos parte de los dueños de un negocio. Generalmente las acciones se compran, venden o intercambian en las bolsas de valores.
Muchas personas se ven beneficiadas de la compra de acciones porque si le va bien a la empresa de la que forman parte también les va bien a sus miembros. En caso de que su valor aumente, puede vender las acciones para obtener ganancias. Pero es preciso considerar que no siempre a las empresas les va bien, por lo que también existe riesgo de pérdida en este tipo de inversiones.
Principales diferencias y puntos de importancia
Aunque, ambas dependen de cómo se mueve el mercado al que pertenecen, las acciones y las criptomonedas tienen características diferentes como la trayectoria. Mientras los movimientos en las bolsas de valores tienen una presencia en el mercado desde los años 1.600; las criptomonedas apenas tienen décadas, pero son consideradas sinónimos del modernismo que llegó con las nuevas tecnologías y muchos son los que creen que las llaman “el oro del futuro”.
La volatilidad del mercado es la posibilidad de que los valores bajan o suben a través del tiempo. En este caso el de la criptomoneda es más alto porque se está moviendo constantemente y no tienen ningún respaldo físico, a diferencia de las acciones. Esto hace que las divisas digitales sean más vulnerables en este sentido.
Como dijimos, las criptomonedas no dependen de entidad de respaldo alguna que la regule. Los inversores en acciones en este sentido están más protegidos que quienes apuestan por la inversión crypto.
En cuanto a estafas, las acciones son vulnerables. Existe una gran cantidad de personas especializadas en hacer creer a otras que vale la pena una inversión cuando realmente la está metiendo en una trampa donde perderá todo su dinero.
Aunque las criptomonedas están protegidas por cadenas de bloques, también se han presentado casos de robos de identidad que han dejado a las víctimas sin nada en sus carteras.
Sobre la diversificación de la inversión, las acciones ofrecen una variedad más amplia de alternativas y esto es importante porque si una inversión en un sector baja, puede recuperarse el alza con otro negocio por el que también se haya apostado.
¿Qué deberíamos hacer?
No existe una mejor que otra, aunque todos sabemos que las criptomonedas son más nuevas y hay menos experiencias en este negocio. De acuerdo con tu capacidad de pérdida puedes invertir en ambas y aumentar la manera de diversificar.
Evalúa cuánto estás dispuesto a perder. Por lo general las acciones son inversiones con más estabilidad que las criptomonedas si las realizas bien diversificadas.
Otro punto para considerar es cuánto aspiras a ganar. Para esto debes saber que, a pesar de que las acciones tienen una mayor estabilidad, las proporciones de las ganancias en criptomonedas son más amplias.
Invertir en acciones o criptomonedas es una decisión que tú tienes que tomar en base a todo lo que has leído. El tiempo en el que quieres obtener resultados, las aspiraciones y las potenciales pérdidas son puntos que no puedes dejar de lado a la hora de hacer la evaluación de lo que más te conviene.