El consumo de combustible se ha disparado en todo el mundo, y con millones de barriles de capacidad de refinación diaria fuera de línea, las refinerías que siguen activas están cosechando algunos de sus márgenes más altos en años.
A nivel mundial, la capacidad de refinación se redujo en alrededor de 2,3 millones de barriles por día durante la pandemia y es probable que a eso se sume otro millón de barriles el próximo año, dijo el analista de Facts Global Energy Steve Sawyer. Eso sucede justo al tiempo que la demanda regresa a niveles prepandémicos. La demanda de combustible está aumentando, los automóviles vuelven a atascar las carreteras y el cambio de gas a petróleo gana velocidad antes del invierno.
Como resultado, las refinerías están disfrutando de márgenes considerables, un cambio bienvenido después de un desafiante 2020. En Estados Unidos, el crack de gasolina Nymex, un indicador aproximado del margen que las refinerías pueden capturar con un barril de crudo basado en los futuros de Nueva York, cotizó este jueves por encima de los US$16 el barril, el nivel más alto desde 2017. Los márgenes también están aumentando en Asia y Europa, donde la escasez de carbón y gas natural está impulsando las perspectivas de demanda de diésel, queroseno y propano antes del invierno.
Los márgenes crecientes indican que la demanda de petróleo crudo seguirá siendo fuerte a medida que las refinerías continúen procesando más para satisfacer las necesidades de consumo. Eso podría significar que las reservas mundiales de petróleo seguirán cayendo en los próximos meses. Se prevé que los balances de gasolina en todo el mundo se ajusten significativamente durante noviembre y diciembre, según Energy Aspects.
Los márgenes estadounidenses también están siendo respaldados por el mantenimiento estacional de las refinerías y una serie de interrupciones relacionadas con el clima, más recientemente las inundaciones que se produjeron después de que el área de San Francisco experimentara lluvias torrenciales a principios de esta semana. Esa inundación empujó los precios en San Francisco a un máximo histórico de US$4,75 por galón, según GasBuddy.
En Europa, las refinerías han obtenido mayores beneficios con la gasolina, en parte porque la demanda en el transporte ha superado los niveles prepandémicos. La demanda en Italia de gasolina en septiembre estuvo por encima de los niveles de 2019, mientras que el consumo en Francia de gasolina ha mejorado más rápido que el del diésel.
Las ganancias de las refinerías asiáticas alcanzaron niveles prepandémicos cuando China, la potencia de procesamiento de combustibles, recortó las exportaciones de productos petróleo en medio de su propia escasez de energía, lo que aumentó los márgenes de combustible para el transporte en toda la región antes de un invierno que podría requerir más combustibles para calefacción.
“La crisis energética de China está reduciendo las exportaciones de gasolina y diésel, tanto dentro como fuera de la región, justo cuando las naciones comienzan con la reapertura y la demanda de ambos se está recuperando”, dijo Sawyer.
Sin duda, la crisis energética está frenando las ganancias de las refinerías que dependen en gran medida de la producción de diésel debido al aumento del costo del gas natural.
Los márgenes de diésel en Europa no son tan altos estacionalmente. Y la mayoría de las estimaciones de margen no incluyen los costos de energía e hidrógeno, que se dispararon a la par de los precios del gas natural en la región. El hidrógeno es particularmente importante en las unidades conocidas como hidrocraqueadores, las grandes máquinas de fabricación de diésel que tradicionalmente han sido los centros de ganancia de las refinerías de la región.
Fuente: Bloomberg