Mineros ilegales vertían cianuro y mercurio al río Madre de Dios.

Operación evitó que se deforesten 60 hectáreas de bosque amazónico.

Nuevo golpe contra la minería ilegal en Madre de Dios. Una operación conjunta entre la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA), el Ejército, La Marina de Guerra y la Policía Nacional, permitió el hallazgo de dos campamentos y el decomiso de equipamiento utilizado la explotación ilegal de oro.

La operación Laberinto 1 permitió el decomiso y destrucción de 44 balsas tracas, 48 tolvas, 50 motores, cuatro generadores eléctricos, dos televisores, tres frascos de mercurio y 425 galones de combustible.

La acción forma parte del Plan Operativo Mercurio 2019 que se desarrolla en La Pampa, distrito de Tambopata, provincia del mismo nombre, Madre de Dios.

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El hallazgo se hizo en el río Madre de Dios, lugar en el que eran efectuadas actividades de minería ilegal, acción que de no ser detenida también habría deforestado 60 hectáreas de bosque, lo que afectaría los recursos hídricos y naturales de la región.

El accionar criminal era perpetrado por hombres que dejaron de recibir miles de dólares con la destrucción de esa maquinaria ilegal, además de una escopeta, un cargador frontal, mangueras, alfombras y otros instrumentos para la extracción del oro en el río.

Con esta acción encabezada por la fiscal provincial de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental, Karina Garay, las autoridades logran minimizar el daño ambiental ocasionado por la contaminación de los ríos, el cual se venía produciendo por la utilización de elementos químicos como mercurio y cianuro, que son altamente peligrosos para el ser humano y las especies animales.

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La representante del Ministerio Público explicó que con la Operación Mercurio han avanzado en la lucha contra la minería ilegal a través de una serie de medidas.

Parte de ese éxito se debe a que las fuerzas armadas y policiales ahora tiene más tiempo para combatir los crímenes ambientales.

Sin embargo, los delitos ecológicos en la Amazonía no se eliminan fácilmente y los grupos ilegales continúan atravesando los bosques.

El aumento de las operaciones contra la minería ilegal, en particular, ha disminuido notablemente -pero no eliminado- el problema.

Fuente: La República