Enel, a través de Enel Generación Piura. trabaja en la provincia de Talara hace más de 25 años con la central térmica Malacas, la principal planta de energía eléctrica del norte peruano. La empresa ha demostrado su contribución al desarrollo talareño, generando más de 400 puestos de trabajo directos e indirectos, además de desarrollar programas en salud, educación y medio ambiente que benefician cada año a más de 15 mil personas. En los últimos seis años, las inversiones de Enel en Malacas superan los 350 millones de soles, además de generar cada año actividades económicas en empresas locales por más de 20 millones de soles.
Actualmente, Malacas corre el riesgo de cerrar debido a una medida cautelar que dispone que nuestro ducto de gas. tubería que solo alimenta a la central, sea transferido a la empresa Gastalsa. Esto ocurre porque se incluyó la infraestructura de Enel en un litigio por la masificación del gas entre esa empresa y el Estado peruano, sin considerar que, en el año 2016, el Ministerio de Energía y Minas reconoció que ese ducto era de uso propio de la central Malacas y no podía ser transferido forzosamente a ningún concesionario de gas.
A raíz de la medida cautelar, Osinergmin ya inició el procedimiento de valorización del ducto de gas para ser transferido a Gastalsa. Si Enel Generación Piura pierde su ducto, la planta Malacas dejará de ser competitiva y tendrá que cerrar sus operaciones, con el consecuente perjuicio económico para toda la provincia de Talara y la región.
Enel confía en que el Poder Judicial revisará el caso con detalle, ya que el fallo previo no consideró que es propietaria del ducto desde 1996, mucho antes de emitidas las normas para la masificación del gas y, por tanto, la medida cautelar resulta ilegal e inconstitucional.
Evitemos el cierre de Malacas, una planta que genera desarrollo para Piura y para el país.