Entrevista a Roque Benavides: Llegó la hora de los grandes proyectos 

– ¿Cómo evalúa usted la labor del Poder Ejecutivo frente a la pandemia?

Todos los peruanos somos testigos de las estadísticas. La contención que fue el primer paso no ha sido lo exitosa que todos quisimos. No se dieron cuenta de que el Perú es esencialmente informal y que no hay forma de controlar a tanta gente que vive del día a día, que se ‘recursea’ y que necesitaba salir de todas maneras. Lamento esta situación, pero el proceso de contención debió tener otras previsiones. Luego, hemos insistido mucho en que no se debieron paralizar todas las actividades económicas cuando, en realidad, se ha debido ser mucho más selectivo. Yo manejo el tema minero, y las minas ya de por sí son espacios como de cuarentena porque el minero va a trabajar y no sale de la mina luego de quince días, por lo menos.  Lo mismo en el caso de la pesca. ¿Por qué no se permitió la pesca? Ha habido un error en paralizar algunas actividades. El presidente dijo que ahora ya se van a permitir que las empresas trabajen sin pedir permiso sino solo presentando documentos que cumplan con requisitos sanitarios, esto está bien solo que un poco tarde.

-¿Ve consecuencias negativas tras la cuarentena?

Hay ya una recesión. Una recesión que significa que, hasta donde yo entiendo, abarca más de dos trimestres de decrecimiento. Bien, el año 2020 vamos a ver decrecida la economía en 15%. Va a ser la peor recesión en la historia republicana del Perú. ¿Cómo hacemos para revertir esta realidad? Yo soy de la idea de que hay que promocionar los proyectos que no están siendo desarrollados, como Chavimochic III, que está paralizado al 80% de obra; el reservorio de Palo Redondo, que quizás muchos no lo conocerán pero yo sí lo conozco; el proyecto Majes Sihuas II; los proyecto del estado paralizados. En el ámbito de la minería hay un montón de proyectos que podrían desarrollarse rápidamente y que, por supuesto, requieren que se respete el medio ambiente y a las comunidades, pero tenemos que sacarlos adelante: Tía María y Conga, que se caen de maduros; Pampa de Pongo, Quellaveco, Zafranal, entre otros, a todos ellos tenemos que darles todo el impulso necesario. En el norte, tenemos también Michiquillay, Galeno, los sulfuros de Yanacocha y de la Zanja, en la zona de Cajamarca. En adición, tenemos le proyecto La Granja, en manos de Río Tinto, que también podría desarrollarse. Todo esto podría constituir una gran tercera ola.

-¿Qué medidas tomar?

Yo sacaría una gran Ley para declarar en emergencia la inversión pública en el Perú, con la finalidad de promoverla. Consideremos que el 80% de la inversión es peruana y 20% es extranjera. Claro que hay que atraer inversión extranjera y respetarla, pero los gringos no nos van a salvar, por lo que tenemos que poner todo en valor. Nos está faltando un sentido de urgencia, se nos viene un huaico de magnitud increíble en el aspecto económico.

-En lo que va de las fases 1 y 2, ¿se va reactivando bien la economía?

Lo que se ha hecho es un esfuerzo. La ministra [María Antonieta] Alva tiene una buena aceptación, lo que demuestra un trabajo dentro de un gabinete que no comparte su posición. Esto lo sabemos todos, no es ninguna novedad porque hay ministros que no creen en la economía de libre mercado y creen que se puede inventar legislación para facilitar cosas, pero al largo plazo van a complicarlo todo. Creo que el asunto de las fases deberíamos ir al 100% de las actividades económicas siempre y cuando cumplan con los protocolos.

-El desempleo ya es un problema, no como consecuencia a mediano o largo plazo de la pandemia, sino ahora cada vez hay más personas quedándose sin empleo…

Por eso he referido un sentido de urgencia: hacer las inversiones que hay que hacer, por eso es que yo digo que se debe lanzar esta tercera ola. Hay que poner en valor todo lo que podamos. Esto no resiste demoras. Por favor, en Estados Unidos se han perdido 40 millones de puestos de trabajo, yo creo que la alternativa acá es reactivar lo más rápidamente posible y lanzar los proyectos sin tanto miramiento. Acá, podemos discutir Tía María, pero eso ya no es un tema de Cocachacra, sino un tema del Perú, para su recuperación y prosperidad. Y si se paralizan de esa manera, se va a paralizar cualquier proyecto en el Perú. Hay que tener, en este momento, el sentido de urgencia, y ya.

-¿Exhortaría usted al gobierno a reactivar todos los negocios de una buena vez?

¿Dónde está nuestro Ministerio de Salud para que haga protocolos para todos los negocios? Yo entiendo que hay gente que vive de eso. Creo que el Minsa tiene que sacar protocolos lo más generales posibles y haciéndolos particulares en casos específicos.

-¿Cree que ha funcionado la cuarentena?

Por las cifras que vemos a diario, la cuarentena no ha funcionado. Por las cifras, creo yo, tenemos una situación donde se nos está diciendo que estamos al nivel de la crisis que hubo en Italia, entonces, yo creo es evidente que, por las razones que no logro entender -ya que no soy epidemiólogo-, la cuarentena no ha sido todo lo exitosa que quisiéramos. ¿Qué hubiera pasado si no hubiéramos tenido cuarentena? No lo sé. No es momento de plantearnos esta pregunta, pero Perú es un país, junto con Chile, con los peores resultados.

-De otra parte, lo cierto es que estamos pues a menos de un año de los comicios, ¿cómo llegaremos a ese momento?

Creo que todo se nos ha complicado, el tema de no poder salir, la cuarentena…; yo creo que el Jurado Nacional de Elecciones tendrá que preocuparse mucho, en la medida de las posibilidades, de hacer las elecciones de forma cada vez más digital. Creo que las campañas van a ser mucho más digitales que presenciales. No se puede pensar en un mitin multitudinario en estas épocas. La pandemia ha venido para cambiarnos la vida y creo que las elecciones no van a ser como eran antes.

– Eso va a estar bien complicado considerando el elevado porcentaje de la población que todavía no se familiariza con el uso del internet…

Por eso, hay que dar la flexibilidad. Si nosotros permitimos que el porcentaje de la población digital vote desde sus casas, ya quitamos un gran porcentaje de ellos en los centros de votación y los que tengan que hacer votación presencial van a tener que requerir ayuda y otro tipo de capacitación para garantizar su seguridad, de ser el caso que la pandemia se prolongue hasta esos días.

– Vizcarra ha resaltado la necesidad de un presidente y un congreso electos para el 2021 que serán importantes porque se trata del Bicentenario de la independencia…

Con el debido respeto al señor presidente de la República, yo ya estaría pensando en el 2050, no en el 2021. Las elecciones del 2021 deberían de ser pensadas por toda la población con una visión de futuro, de largo plazo, que permita que el Perú sea un país mucho más desarrollado, mucho más inclusivo, con más oportunidades para la gente, con mejores servicios de salud y que tenga un sector privado eficiente, serio, honorable. Así que, discrepo de estar hablando del bicentenario, ya pasó el momento de eso. Ahora, estamos en una crisis.

– En un análisis, digamos, apresurado, cuál debería ser el enfoque para las elecciones que se nos vienen…

Cuando nosotros analizamos la escuela austriaca, realmente nos damos cuenta de la importancia de la libertad o la libertad entendida como libertad económica, libertad de prensa, libertad de escoger. Yo creo que el Perú debería orientarse a ser un país como lo fue Alemania después de la Segunda Guerra Mundial, que se abrió a la economía de libre mercado y eso tiene que ver con la libertad. No tratemos de reinventar el futuro, hagamos lo que han hecho otros y han sido exitosos. El tema de la libertad económica, de promover la empresa privada es fundamental. Cuando veo las cosas “ingeniosas” que están saliendo del Congreso, nos estamos equivocando y no nos damos cuenta de que tenemos que legislar para el largo plazo. Necesitamos también mucha inversión extranjera y, para lograr atraer la inversión extranjera, necesitaremos ideas que sean claras.

– ¿Qué tanto está saliendo este Congreso?

Hemos visto buenas iniciativas pero, como siempre, las malas son las que salen mucho en la prensa. Por ejemplo, esa idea peregrina de regresar a la Constitución de 1979, que fue liderada por Haya de la Torre, de quien tengo orgullo de ser su pariente, pero hay que entender que esa carta política fue desarrollada 10 años antes de la caída del muro de Berlín, mientras que la del 93 fue hecha unos años después de la caída del muro. El mundo es uno antes y otro después de este suceso porque ya no se discute le camino a seguir, porque la ruta es la economía de libre mercado. Por otro lado, regresar a la del 79 significa cambiar toda la legislación que se ha desarrollado desde 1993. No podemos retroceder. Dentro de esas ideas curiosas surge también un proyecto para prohibir despidos. Esto es no entender la economía. Nadie lo puede hacer porque ese aspecto es económico más allá de la solidaridad y deseo de preservar puestos de trabajo. Las empresas ya no resisten y las micro y pequeñas empresas están atravesando la parte más dramática. Si aprueban eso, va en contra de la libertad de contratación.

Usted ha dicho que no va a ser candidato, ¿qué lo llevó a hacer ese necesario deslinde?

A mí me han creado seis cuentas de Facebook y en dos o tres de esas cuentas ponían que yo era candidato para el 2021. Entonces, yo envié un mensaje de lo que yo utilizo, Twitter, diciendo que yo no era candidato y que, por supuesto, mi función está en el sector privado y desde esa posición es que yo contribuyo con mi país.

-¿O quizás cree usted que lo están lanzando a una candidatura?

Puede haber gente que eso desee, no descarto esa posibilidad y mucha gente me relaciona con la figura de Víctor Raúl Haya de la Torre, mi tío, pues yo fui muy cercano a él y, seguramente, algo de eso pueda haber. Otra gente es muy generosa conmigo y creerá que yo tengo para contribuir más en ese campo. Yo, modestia aparte, puedo solamente agradecer esa generosidad.

-Y si no fuera así, quizás alguien busca perjudicarlo o ‘quemar’ una precandidatura…

También puede ser porque cuando en la política peruana alguien se lanza, inmediatamente vienen las críticas, vienen las mentiras, vienen los agravios y eso sí debería llevarnos a reflexión. No puede ser que en la política peruana solamente entre la gente que va a ser denostada. En el Perú hay que promover más una política decente que contribuya a que el Perú sea un mejor país.

-Lo escucho decir “no soy candidato”, pero esa frase está en tiempo presente, ¿no puede decir que con esa misma convicción que no será candidato, es decir, en tiempo futuro?

No voy a ser a ser candidato. Ya Mario Ghibellini comenzó a jugar con el tiempo presente y futuro y yo le tengo mucho aprecio porque cuando él era estudiante, yo lo llevé a Villa Mercedes a conocer a Víctor Raúl. Él era bien jovencito, en ese entonces. Pero no, no hay ninguna idea, la respuesta es no voy a ser candidato en el 2021.

Fuente: Expreso