ProActivo | Cuando el país empieza a sentir el peso de la crisis económica, la mirada está puesta en el sector minero y en cuánto puede jalonear la macroeconomía nacional, como en décadas pasadas. Un desafío para el gobierno y en particular para el sector minero energético.
Es claro ahora que el tiempo es crucial, más aún cuando las necesidades aumentan y se quiere captar inversiones de magnitud, que puedan lograr la recuperación del país.
Susana Vilca, quien fuera titular de la cartera de Energía y Minas, desde el 14 de febrero hasta el 15 de julio, fue una de las autoridades delegadas que le tocó responder ante la grave emergencia por la inimaginable pandemia ocasionada por el Covid-19.
Su lugar en momentos de emergencia, ha sido en el ministerio que alberga a la actividad generadora de recursos para el Perú: la minería.
Proviene de la minería, ingeniera de minas, activa parlamentaria en la comisión de Energía y Minas; y luego presidenta del Ingemmet, nombrada ministra de Energía y Minas, pocos días antes de la realización de la convención minera más importante del mundo, PDAC; un lugar clave para captar inversiones hacia el país. Un foro global retador y muy bien conocido por ella. Hasta ese momento su preocupación inmediata era llevar a Toronto, normativas esperadas, que devuelvan al país el atractivo para captar las inversiones necesarias. A los dos días de su retorno, el 6 de marzo se declara el primer paciente por coronavirus.
El 15 de marzo, el presidente Martín Vizcarra en su Mensaje a la Nación, anuncia que en los últimos días, el COVID-19 se ha extendido a diversos países del mundo, y que la Organización Mundial de la Salud lo declaró como una pandemia, por lo que pidió al mundo, adoptar medidas extremas para frenar a la enfermedad. Es así como se declara el estado de emergencia nacional y prácticamente la paralización productiva del país, lo que inicialmente fue por 15 días, se prolongó periódicamente. La ex ministra, detalla en el Especial de ProActivo, las circunstancias que vivió y menciona los avances que se dieron en esa etapa para fortalecer la puesta en marcha de los proyectos detenidos, pero en camino.
Ingeniera Vilca ¿Cómo se siente luego de la intensa jornada vivida a la cabeza del sector estratégico del Perú, en momentos históricos para la humanidad y para el país?
Satisfecha de haber servido a mi país en la etapa más difícil de su historia, haber aportado con una gestión estratégica en plena pandemia, gestionar algo inédito, teníamos que garantizar el abastecimiento de la energía eléctrica y el combustible en medio de la inamovilidad y la caída histórica del precio del petróleo crudo.
Tuvimos que garantizar el sostenimiento de las actividades críticas en minería, para asegurar el cuidado al medio ambiente y la seguridad física de las instalaciones en las unidades mineras, para lo cual había que lograr que estén abastecidos de insumos básicos que no se estaban produciendo ni movilizando.
Afrontamos la movilización de los trabajadores que en aislamiento aportaron con la producción minera a la empresa donde laboran y al país, en gran parte de las operaciones mineras.
Asimismo, plantear y lograr la reanudación de actividades del principal sector productivo en medio de la propagación de contagios por Covid-19, con los protocolos sanitarios correspondientes, porque solo ello pondría el equilibrio y la ponderación entre todo lo que significaba la contención de la pandemia por la salud de los peruanos, y los ingresos fiscales necesarios para la economía nacional, con los sectores productivos prioritarios que marcan el PBI nacional históricamente.
Siento satisfacción de dejar encaminada la reactivación económica minero-energética, con los marcos regulatorios elaborados y requeridos para el despegue de la economía peruana, dejar el cronograma de acciones en gestión social, así como la disposición de fortalecer la Oficina de Gestión Social, con mayor número de personal especializado para acelerar los procesos paralelamente en varias zonas para apuntalar la cartera de proyectos, y destrabarlos en sus procedimientos y autorizaciones.
Siento haber cumplido como parte del equipo que hizo gestión diaria en toda esta etapa, para afrontar la crisis sanitaria y a la vez la crisis económica.
Logramos que innumerables empresas de los 3 subsectores administrados por el MINEM se unieran a la cruzada solidaria nacional, para sumarse a la dotación de equipos, materiales, insumos, mobiliarios, medicinas, balones de oxígeno, plantas de oxígeno, ventiladores mecánicos, EPPs y otros, para atender las situaciones de emergencia en todo el territorio nacional, ninguno se negó, hoy lo siguen haciendo. ¡Muchas gracias a todos!
¿Qué preocupaciones tenía el sector antes de la pandemia?
La necesidad de impulsar las exploraciones mineras que significaba un descenso en inversiones respecto al año anterior. Las constantes críticas a la tramitología para obtener autorizaciones para diferentes etapas del ciclo minero.
El marco regulatorio abundante con muchos silencios administrativos negativos, acompañado de problemas sociales en diferentes puntos del territorio donde se encuentran ubicados los proyectos de exploración, construcción u operación.
También la falta de base de datos con mapeo de las comunidades campesinas e indígenas que facilite la identificación en estudios previos para temas de consulta previa.
La constante objeción -por la falta de información- sobre los beneficios de la minería e hidrocarburos, por la falta de trazabilidad del canon, del sobrecanon, y de las regalías mineras, orientados a inversiones públicas y cierre de brechas.
¿Cuáles son los nuevos desafíos que aparecen en esta coyuntura de emergencia sanitaria?
Conservar el número requerido de trabajadores libres de Covid, sobre todo en el relevo de turnos en el sistema de trabajo, que impacta directamente a la capacidad de producción; se opera en una etapa de mayores costos de producción. Gestionar todo el manejo operativo con leyes de corte superiores, requiere de una ingeniería capaz de ver el equilibrio en costo beneficio y vida de la mina.
Más allá de que en todos los tiempos la seguridad y salud ocupacional tenía un lugar muy importante en el bienestar de los trabajadores, hoy se agrega el control y vigilancia de los mismos por esta pandemia.
Otro desafío es el mayor uso de la tecnología en las actividades del quehacer minero. También están los sistemas laborales prolongados, resultado de consenso laboral, que implica nuevas medidas de salud.
A su criterio ¿cuán atractivas son las inversiones mineras en Perú, en este contexto de pandemia?
La minería es por naturaleza una actividad de riesgo y de arriesgados. Esa fortaleza no la quitó la pandemia, hay inversionistas que siguen apostando por el Perú, prueba de ello son las exploraciones que se tienen a la espera de la culminación de las consultas previas y autorizaciones.
Asimismo está el entusiasmo con que los titulares empresarios mineros, se preparaban para la reanudación de sus operaciones en las fases de la reactivación.
Era impresionante y motivador, gracias a ese esfuerzo sumado, hoy vamos rumbo a la recuperación económica de nuestro país; les expreso mis reconocimientos y agradecimiento como ciudadana peruana.
Lo propio se observó con las inversiones en hidrocarburos y electricidad. A todos gracias a vuestro esfuerzo.
¿Cuál fue el nivel de coordinación con los otros sectores y con los gremios?
Considero que no hay mejor motivo para recoger la opinión de los actores u operadores de la actividad minera y energética, a quienes se orienta toda la normativa que el MINEM elabora, para que sea aplicable y promocional, dentro de los estándares técnicos y socioambientales, para hacer de estas actividades más competitivas, pero también pensando y midiendo el impacto positivo que genere a su entorno y al país.
Desde que empezó mi gestión y la pandemia, tuvimos una serie de reuniones de trabajo con los otros sectores gubernamentales, con temas minero energéticos. Ya sea con ministerios, gobiernos regionales, Comisión de Energía y Minas del Congreso de la República; y con gremios empresariales de los tres subsectores minería, hidrocarburos y electricidad, en el marco de mesas ejecutivas, así como monitorear y administrar desde el Estado a la actividad en pandemia.
Asimismo, sostuvimos reuniones con el Colegio de Ingenieros del Perú, la Nacional; y con la sede Lima, con el Capítulo de Minas, con el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, a quienes agradecemos sus valiosos aportes en planteamientos.
Vía remota tuvimos intercambios de experiencias y recogimos las de Chile, Australia, Sudáfrica, entre otros; también se conectaron representantes de trabajadores mineros por la tecnología para control y vigilancia sanitaria. Pudimos elaborar marcos de focalización y protocolos en nuestro sector para la reactivación, en una etapa singular era detalloso, para alcanzar cubrir la medida de manera global, para cada estrato, cada unidad, teníamos que escucharlos antes, a todos; fundamentalmente por la salud del personal involucrado.
Agradezco a todo el equipo del MINEM por sus esfuerzos en tiempos tan difíciles y arriesgados, con quienes pudimos lograr todos estos resultados que detallo en la entrevista, y mis mejores deseos para mi sucesor.
Vea la entrevista completa aquí: https://bit.ly/3hFrqaN
PROACTIVO - INFORME ESPECIAL - JULIO 2020