Los médicos alemanes, Klaus-Dieter John y su esposa Martina
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Denominado “Esperanza de Dios” por el significado de su nombre en quechua, el hospital Diospi Suyana ha cumplido 10 años de existencia brindando servicios de salud de calidad en beneficio de la gente pobre del distrito de Curahuasi, Apurímac, bajo la administración de una asociación religiosa gestada por una pareja de médicos alemanes. Su director, es el doctor Klaus-Dieter John, quien junto a su esposa Martina y un reducido grupo de personas hicieron realidad esa obra inaugurada el 31 de agosto del 2007 y que entró en funciones en octubre de este mismo año.
“El hospital comenzó a funcionar solo con consulta externa, pero a partir de mayo del 2008 se hicieron las primeras cirugías; éramos un grupo reducido de personas y ahora somos 250”, destacó el galeno.
Indicó que el sanatorio, equipado con alta tecnología alemana, ofrece tratamiento médico de buena calidad por un precio económico al alcance de la gente humilde, pero que también atiende a niños y ancianos de forma gratuita.
Informó que este año inaugurarán el segundo piso con 40 camas más, que se sumarán a las 100 existentes, y que también tienen previsto abrir la clínica dental.
Recordó que la idea de hacer ese hospital empezó en el 2002, cuando abrieron la Casa de la juventud de Curahuasi, en la que se atendía hasta 400 niños de escasos recursos.
Dio a conocer que la tarea de ayuda que desarrolla el hospital es conocida internacionalmente a través de las presentaciones que se han hecho en 23 países de 5 continentes, para gestionar fondos de ayuda.
Mientras que la televisión internacional hizo un reportaje de 25 minutos sobre esta obra, en inglés, castellano alemán y árabe, la que ha sido vista por millones.
Colegio, radio y TV
El médico alemán refirió que la asociación a su cargo, paralelamente fundó el 2014 el colegio Diospi Suyana donde actualmente estudian 600 alumnos, pero que cada año aumentan en 30 o 40 más.
Asimismo, manifestó que desde el 31 de agosto del 2016 cuentan con una estación de radio y televisión, con frecuencias obtenidas para operar en Puerto Maldonado, Puno, Chincheros, Andahuaylas y Curahuasi, y que esperan con mayor tecnología llegar hasta un millón de oyentes.
Dijo que el canal de televisión, está en un edificio de dos pisos y con un estudio moderno, actualmente solo cubre Curahuasi, pero que la meta es llegar a otros lugares del Perú y para lo cual necesitan más espacio de satélite o usar streaming por internet.
“Y con nuestra radio haremos programa de familia, de valores, salud y algo de fe, tanto en quechua como en castellano, esa es la idea”, remarcó.
Señaló que para realizar esas obras de carácter social, han recibido donaciones por 264 millones de dólares durante 10 años.