Luis Rivera, vicepresidente ejecutivo de Gold Fields Las Américas, se pronunció sobre la eficiencia energética, la tendencia a un mundo descarbonizado y la posible explotación de litio y uranio en territorio peruano.
Eficiencia energética
En un nivel interno, la misma industria minera busca la eficiencia en el uso de la energía utilizando diversas tecnologías. “Los conceptos de optimización de activos tienen un gran componente de eficiencia energética, sin eso no puede ser optimizado”, manifestó Rivera en la gala de los Premios ProActivo 2023, como parte del panel central “¿Cómo la minería moderna contribuye a un mundo más verde?“.
A modo de ejemplo de eficiencia energética, mencionó la renovación de vehículos gigantes por los eléctricos. “Hoy, los camiones usan motores Euro 4 con emisiones bajas, recuperación de energía en sus baterías, aditivos que alinean los polímeros en el combustible que aceleran la combustión”, contó.
Dijo que las emisiones de Alcance 3 les representa un mayor desafío y que algunas operaciones de hierro las generan en más del 95 % e incluso 99 %: “De las fundiciones aguas abajo del producto, es donde se genera el carbono, no tanto en la operación interna”, precisó.
En ese sentido, observó que el rol de la industria es la capacidad de concatenación que tiene con sus proveedores locales, nacionales e internacionales. A su vez, estos grandes proveedores o fabricantes de equipos originales (OEMS, por sus siglas en inglés) se suman a compromisos globales como los del Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM, por sus siglas en inglés). “La industria concatena con sus proveedores aguas arriba, los que les proveen, por ejemplo, aceros; pero también con los que consumen sus productos concentrados de cobre, de hierro”, expresó.
La responsabilidad minera por la descarbonización
El ejecutivo abordó el entorno social al mencionar que la deforestación es la segunda razón de emisión de carbón en el mundo natural. En ese sentido, indicó que la industria minera tiene capacidad de reforestación en sus alrededores, y “de esa manera también contribuye a un mundo más descarbonizado”. Como ejemplos, mencionó los bosques de Huarmey, de Antamina; los de Hualgayoc, de Gold Fields, y la planta de tratamiento La Enlozada en Arequipa, de Cerro Verde. “Hay que entender que la carbonización no es un tema exclusivo de la industria minera. Es un tema global que abarca a toda la sociedad, a todas las actividades del mundo como civilización. La capacidad de la industria minera de entender eso y traerlo a su sociedad es única, porque somos organizaciones altamente eficientes, sobre todo la minería moderna, que es institucionalizada y con voz en el país donde trabaja. Esa es la gran ventaja de tener grandes compañías mineras en nuestro país”, sostuvo.
Un mendigo sentado en un banco polimetálico
En otro momento, Rivera señaló que “el mundo camina hacia una descarbonización” inminente. Para ello, existen presiones por parte de instituciones, organismos multinacionales, los países y la sociedad en general.
Asimismo, hay una autopresión de las propias compañías mineras. “El mundo en la próxima década estará más descarbonizado”, refirió. Y añade que, como consecuencia de esta tendencia, la demanda de cobre se multiplicará por casi el 20 %, que equivale a 35 millones de toneladas del metal rojo. Sin embargo, “el mundo solo va a producir a su vez 25 o 27 millones de toneladas de cobre”, remarcó. “El Perú es privilegiado y tiene ese cobre que el mundo necesita, que va a llegar a precios nunca vistos y con los que puede beneficiarse económicamente. Esa es la visión que debemos tener. Así que facilitar al país la producción de un metal que el mundo necesita es un mandato que debe tener todo hacedor de política pública”, enfatizó.
Por último, Luis Rivera mencionó que también hay otros metales que esperan explotarse. “Esta el litio, el uranio, y es una maldad que, en pleno año 2023, no tengamos una normativa para explotar uranio, por ejemplo; que no tengamos iniciativas para buscar litio”, aseveró.
Aclaró que en Perú hay litio cristalizado, el cual “tiene mucha mejor ley y es mucho más eficiente y rico” que el litio sedimentario de Chile, Bolivia o Argentina. “No tenemos una visión clara de ese potencial, sabemos que está en el sur, pero no estamos trabajando en ello”, afirmó. “Hay mucho por hacer en el país, pero no dejemos que ese viejo refrán siga siendo una realidad. Ese que dice que el Perú es un mendigo sentado en un banco de oro. Más bien, es un mendigo sentado en un banco de cobre, litio, uranio y todos los metales que el mundo necesita. Solo hay que sacarlos”, puntualizó.
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