En un mundo donde la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad empresarial, cuestiones como la transición energética y la reducción de la huella de carbono son ejes fundamentales. En este contexto, Fenix celebra un logro significativo al conmemorar el primer aniversario de su planta de hidrógeno verde.
Esta innovadora planta, la primera de su tipo integrada en una central eléctrica del país, implica un primer paso para reducir la huella de carbono de la central termoeléctrica de Fenix en Chilca, además de demostrar el enorme potencial del hidrógeno verde como una solución energética sostenible.
Desde su inauguración, ha producido más de 5,200 m³ de hidrógeno verde, reemplazando el hidrógeno gris que anteriormente se utilizaba en los generadores de la central. Este cambio ha significado una reducción de aproximadamente 900 toneladas de CO2 equivalente, según la ISO 14064, además de generar un ahorro económico de USD 46,000 durante su primer año de operación.
“En Fenix y en Colbún, creemos que el hidrógeno verde es un pilar fundamental para la descarbonización del sector energético y otros procesos industriales. Este proyecto refuerza nuestro compromiso con la sostenibilidad y la innovación en nuestras operaciones”, señaló Alejandro Galarza, gerente de generación de Fenix.
Agregó que: “los resultados de este primer año revelan el gran potencial del país en hidrógeno y abre el camino para la implementación de nuevas tecnologías y energías más sostenibles”.
La planta de hidrógeno verde utiliza un proceso de electrólisis alimentado por una planta solar fotovoltaica de 190 paneles, con una capacidad instalada de 110 kW. Este proyecto es un ejemplo del liderazgo de Fenix en el desarrollo de soluciones energéticas sostenibles, alineándose con la estrategia de crecimiento en energías renovables del grupo Colbún, que incluye un pipeline de proyectos solares y eólicos con más de 1,900 MW en Perú.
Además de sus beneficios ambientales y económicos, la planta de hidrógeno verde ha generado un impacto positivo para los trabajadores en términos de seguridad, al reducir su exposición a los riesgos asociados con la manipulación de cilindros de hidrógeno.
Con esta iniciativa, Fenix busca demostrar que la innovación y la sostenibilidad son pilares clave de su operación eléctrica.