Uno de los desafíos a los que se enfrenta el Consejo Internacional sobre Minería y Metales (ICMM) es ampliar el concepto de salud y seguridad en el trabajo, particularmente en la actividad minera bajo su competencia, manifestó Frank Fox, presidente del comité de salud y seguridad de dicho organismo, en la Conferencia sobre Salud y Seguridad del ICMM, en Santiago de Chile.
“Ese enfoque tiene que ver con la manera en la que una empresa debe entender los procedimientos para enfrentar esos temas entre sus trabajadores y que también incluye a las comunidades de su entorno”, apuntó.
Fox dijo que los esfuerzos que se realizan para tener un equipo de trabajo más seguro y sano, tiene que ver con el propio beneficio de la empresa. “Una mejor salud en el lugar de trabajo y en las comunidades circundantes es directamente positivo para la empresa”, recalcó.
Hace posible desarrollo sostenible
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como «un estado de total bienestar físico, mental y social y no solo la ausencia de enfermedad”, puntualizó el directivo.
Subrayó que esa definición es un magnífico punto de partida para pensar en la salud y seguridad en el contexto del desarrollo sostenible. “La salud es primordial para el desarrollo sostenible, y «una buena salud implica una buena empresa»”, afirmó.
Agregó que el tema del agua potable limpia, por ejemplo, combina todos esos ámbitos. “Es un requisito humano básico esencial para la salud a largo plazo de cualquier proyecto y de la comunidad en general”, consideró.
Impacto en la productividad
Fox comentó que la salud es el punto central de muchas de las preocupaciones que tanto el ICMM, las empresas y las comunidades tienen respecto a la actividad minera.
“Es el eje de una rueda, siendo la seguridad, productividad, entorno y problemas sociales sus radios. Sin salud, no es posible estar totalmente seguro y la inseguridad, a su vez, afecta a la salud”, señaló.
Afirmó que la salud tiene un impacto directo en la productividad, a través del ausentismo laboral.
“Si un proyecto minero es responsable de emisiones a la atmósfera o vertidos al agua, se trata de un problema que afecta la salud de las personas”, indicó.
Añadió que lo mismo pasa con los procesos de gestión de productos químicos para procesar los minerales, por los efectos que tienen contra la salud.
“Las medidas ambientales, la conservación de la biodiversidad y las emisiones de gases efecto invernadero tienen que ver en definitiva con la salud humana”, apuntó.
Asimismo, señaló que la vivienda y las condiciones de vida en las comunidades, tienen un efecto directo e indirecto en la salud, y que la industria minera parece tener un mayor impacto en este tema, que otras industrias. “El tipo de vivienda e infraestructura que se construye cerca de las minas, tiene un gran impacto en la salud de la comunidad y en la productividad y rentabilidad de la mina”, afirmó.
Informó que el ICMM considerando estos problemas, ha publicado guías de buenas prácticas sobre VIH/ SIDA, tuberculosis y malaria, evaluación socioeconómica y evaluación del impacto sobre la salud, pero que “aún hay mucho por hacer”.
ICMM alienta acción colectiva
“Mi propia empresa Anglo American, ha tratado de fomentar el debate en torno al vínculo entre la salud y un mayor desarrollo socioeconómico”, destacó.
Recordó que la reciente Conferencia sobre Salud y Seguridad del ICMM, celebrada en Santiago, debe demostrar buenos resultados sobre el tema a largo plazo. “Los pensadores y líderes, entre nuestros miembros, propugnan una necesaria acción colectiva para mejorar la seguridad en el trabajo y la salud integral de aquellas personas afectadas por la minería. En resumen, necesitamos reducir la probabilidad de daños, más que esperar a que ocurra un daño para actuar”, expuso.