Foto: OCEANA
El gobierno chileno, a través de su Consejo de Ministros, tomó una decisión clave al rechazar nuevamente el controvertido proyecto minero y portuario Dominga. Esta iniciativa, que contempla la extracción de hierro y cobre a cielo abierto junto con la construcción de infraestructura portuaria y una planta desalinizadora, fue desestimada debido a su potencial impacto ambiental en una de las zonas más biodiversas del país.
¿Qué es el proyecto Dominga?
El proyecto Dominga, liderado por la minera chilena Andes Iron, representa una inversión estimada de 2.500 millones de dólares. Su propuesta incluye la explotación minera cerca del pueblo de La Higuera, a 530 kilómetros al norte de Santiago, en las cercanías de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt. Esta área es el refugio del 80% de la población mundial del pingüino de Humboldt, una especie en peligro de extinción.
El plan también contempla la instalación de una planta de tratamiento, depósitos, una desalinizadora y un puerto destinado al transporte de minerales. Sin embargo, su ubicación en un ecosistema tan sensible ha generado preocupación entre ambientalistas y expertos.
Razones detrás del rechazo
La decisión del Consejo de Ministros, tomada de manera unánime, estuvo motivada por varias deficiencias detectadas en la propuesta. Entre las principales razones destacan:
- Ausencia de un plan de emergencia adecuado para responder a derrames de hidrocarburos.
- Insuficiente información sobre el impacto en el hábitat de especies endémicas, como el pingüino de Humboldt, chungungos (nutrias más pequeñas del mundo) y delfines nariz de botella.
- Riesgos potenciales para cientos de lobos marinos y la biodiversidad marina cercana.
Según el Ministerio de Medio Ambiente, la falta de medidas concretas para proteger este delicado ecosistema fue un factor determinante en la decisión.
Un proyecto marcado por la controversia
Desde su presentación hace más de una década, el proyecto Dominga ha sido objeto de intenso debate en Chile. En 2017, durante el segundo mandato de Michelle Bachelet, ya había sido rechazado por razones similares. Posteriormente, en enero de 2023, el gobierno del presidente Gabriel Boric reafirmó esta postura, pero Andes Iron apeló la decisión ante un tribunal ambiental.
La minera sostiene que su proyecto cumple con todos los estándares de evaluación ambiental y cuenta con el apoyo de una parte significativa de la comunidad de La Higuera, una zona que enfrenta altos índices de pobreza. Sin embargo, los detractores argumentan que los riesgos para el ecosistema superan los posibles beneficios económicos.
La importancia de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt
La Reserva Nacional Pingüino de Humboldt es una de las joyas naturales de Chile. Este área protegida alberga no solo al pingüino de Humboldt, sino también a una gran diversidad de fauna marina y terrestre. Su importancia ecológica trasciende las fronteras del país, convirtiéndola en un lugar clave para la conservación global.
La cercanía del proyecto Dominga a esta reserva plantea riesgos significativos, como la contaminación de las aguas, la destrucción de hábitats y el desplazamiento de especies. En este contexto, la decisión de rechazar el proyecto refuerza el compromiso de Chile con la protección ambiental.
Un balance entre desarrollo y sostenibilidad
El caso Dominga pone de manifiesto el desafío de equilibrar el desarrollo económico con la preservación del medio ambiente. Mientras algunos sectores ven en el proyecto una oportunidad para generar empleo y crecimiento económico, otros enfatizan la necesidad de proteger los recursos naturales y la biodiversidad.
El rechazo al proyecto también envía un mensaje claro sobre la dirección que Chile quiere tomar en términos de desarrollo sostenible, priorizando el respeto por sus ecosistemas únicos y su rol como líder en la lucha contra el cambio climático.
¿Qué sigue para el proyecto Dominga?
A pesar del rechazo del Consejo de Ministros, Andes Iron aún tiene la posibilidad de apelar nuevamente ante las instancias legales correspondientes. Este proceso podría extenderse, manteniendo el debate sobre el futuro de Dominga en la agenda pública.
Además, la presión internacional y el interés por la biodiversidad chilena seguirán siendo factores clave en cualquier decisión futura relacionada con este proyecto.