El ministro de Salud, Hernando Cevallos, afirmó que “por ahora, las cuarentenas y medidas extremas por la pandemia del COVID-19 están descartadas”. Esto, explicó porque se ha elaborado una nueva evaluación sobre el riesgo sanitario en que se encuentran las provincias y regiones.
En conferencia de prensa ofrecida el último miércoles, sostuvo que el nuevo balance sobre el riesgo sanitario a nivel provincias y departamentos ya ha sido presentada ante el Consejo de Ministros. Explicó que de esta manera, se dispondrá, según el resultado, nuevas acciones para enfrentar el avance del nuevo coronavirus.
“Se ha elaborado en el Ministerio de Salud una nueva evaluación de las provincias y regiones en riesgo de manera proactiva. Estamos en la etapa de diseñar, en cada una [provincia o región] los aspectos que tienen que ver con la restricción de libertades constitucionales, [para establecer] qué es lo más conveniente. Este es un trabajo que se hace en conjunto con el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) porque las restricciones tienen que ser equilibradas ‘para no parar la economía’”, manifestó.
En este contexto, afirmó: “Por ahora, las cuarentenas y medidas extremas están por ahora descartadas, porque no nos han dado el resultado que hubiéramos querido”.
Vale precisar que hasta el domingo 22 de agosto, regirán las disposiciones del estado de emergencia nacional frente al COVID-19, que fueron anunciadas durante el gobierno del expresidente Francisco Sagasti.
Hasta la fecha estas medidas responden a la clasificación de cada región, de acuerdo al riesgo de contagio: muy alto, alto y moderado. Además, las acciones las tomaba el gobierno anterior cada tres semanas.
Plan ante eventual tercera ola
Cevallos Flores remarcó que el mensaje que desea darle al país es que en el Ministerio de Salud dispondrá acciones no solo de manera centralizada, sino en acuerdo con todas las regiones. “Estamos implementando el plan para poder contener los distintos escenarios que se puedan presentar durante la tercera ola”, señaló.
“Hemos conversado con los gobernadores regionales que, en cada región que tiene características especiales, se diseñe un plan para llegar a las personas más vulnerables”, indicó.
Resaltó que se ha pasado de tener 200 camas, cuando empezó la primera ola de la pandemia, a más de 2.800; el personal está más entrenado para trabajar con los pacientes con COVID-19; hay una mejor dotación de oxígeno y se avanza en el proceso de vacunación.
Fuente: Gestión