En las últimas semanas, hemos sido testigos del enfrentamiento entre los gobiernos regionales de Arequipa y Moquegua por la ubicación del polo petroquímico que deriva del Gasoducto Sur Peruano (GSP), y ello está motivado porque el Estado ha dejado en manos de los inversionistas privados la definición del lugar de su construcción, aunque esto tampoco estaría asegurado.
Para Rafael Laca Sánchez, experto en temas energéticos, el lugar del polo petroquímico dependerá inicialmente del trazado del ducto, lo cual está precisado en el contrato suscrito el año pasado con Odebretch.
En su opinión esta evaluación técnica y social no debería depender de las concesionarias sino del Estado “porque ellas van a ver por dónde es más rentable para sus bolsillos llevar su tubo”, anota.
Jorge Manco Zaconetti, investigador de la UNMSM, señala que en efecto la definición del polo petroquímico e incluso su construcción depende de las trasnacionales.
Explica que un tema de fondo, poco aclarado hasta hoy por el Gobierno son las reservas de gas natural que alimentarán el GSP, pues a la fecha el Ministerio de Energía y Minas (MEM) se ha limitado a informar que el Lote 88 (que tiene precio regulado y que debe estar destinado al consumo interno por contrato) será el surtidor de este gigantesco proyecto energético.
Manco Zaconetti precisa que debido al tipo de contratos (de licencia) que ofrece el Perú no se tiene soberanía sobre los hidrocarburos, pues las moléculas corresponden a las empresas, mientras que el Estado sólo cobra las regalías e impuestos.
“Utilizando la Ley de Hidrocarburos y sin afectar los bolsillos de las empresas, se deben convertir los contratos de licencia a contratos de servicios. Así los hidrocarburos serán propiedad del Estado y se fija una regalía inversa”, anota.
El investigador sanmarquino recuerda que el fenecido Proyecto Kuntur (con el mismo trazado del GSP), tenía como abastecedores a los Lotes 57 y 58, sin embargo este último lote hoy está en manos de la estatal china CNPC.
Como es sabido, China tiene una política de destinar para su suministro todos los recursos naturales de los proyectos que compra en el mundo.
“Entonces no queda claro de dónde saldrán las reservas del GSP, pues se piensa que el Lote 88 es la gallina de los huevos de oro y que esas reservas son inagotables. Pero es evidente que si se define que el GSP tenga como suministro gas del Lote 58 será CNPC quien tenga la última palabra sobre la petroquímica, pues al ser el dueño del recurso puede optar por exportarlo”, advierte.
IRRACIONAL DISPUTA
Para Laca Sánchez, la discusión si el gasoducto deba ir en Ilo en Marcona tiene un tinte político de parte de las autoridades regionales vinculadas, porque lo que está en juego es el canon. Recuerda que un antecedente similar se suscitó cuando se construyó Pampa Melchorita en Chincha, en donde hubo una disputa para que se construyera en Cañete.
“Por eso considero que lo mejor es que sea cuestión de Estado definir la ubicación, porque al final de cuentas a las empresas no les interesa lo que pase en cada población”, recomienda.
Lo que sí llama la atención del especialista es el temprano anuncio del Presidente Humala, al igual que el ex Presidente García, de exportar energía a los países vecinos (Chile es el más sonado) cuando lo único expuesto por el sector es que el alimento del GSP será el Lote 88 que está confinado al mercado interno peruano, además de tener precio barato pues es regulado.
“El fondo del asunto es si vamos a utilizar un recurso tan económico como el del Lote 88 con precio regulado para vendérselo a Chile y en menos de 15 años terminar con el gas y enfrentar una crisis energética como la de Chile y Argentina”, cuestiona.
Para Laca Sánchez sobre este tema se mueven intereses muy altos y que la petroquímica puede ser un tema accesitario pues se debe exportar energía en base al gas cuando se desarrollen más hidráulicas y tener un mix en generación (entre térmicas y hidroeléctricas) que nos permita sobre llevar cualquier contratiempo y no repetir experiencias negativas en la región.
No habría ducto de líquidos en el proyecto del Gasoducto al sur
El congresista Manuel Dammert alertó que el Gasoducto Sur Peruano se encuentra hoy entrampado pues se desconoce si se desarrollará la petroquímica que es la parte más rica del proyecto.
Denunció que Odebretch anunció que hará el gasoducto pero no el poliducto y peor aún que se desactivó la comisión que había formado el Gobierno para establecer el precio que el productor le vendería al comprador el etano y el metano.
“El Gobierno ha anunciado que no va a definir el polo sino los privados cuando la ley dice que si no hay acuerdo entre el comprador y el vendedor es el Estado vía Osinergmin quien fija el precio”, criticó Dammert.
La República