Víctor Fuentes IPE

La transición hacia energías renovables a nivel global permite vislumbrar un escenario positivo para el Perú, segundo productor cuprífero en el mundo, debido a la mayor demanda del cobre, materia prima en la fabricación de vehículos eléctricos, así como redes eléctricas y paneles solares, entre otros.

Ante dicho panorama, el gerente de Políticas Públicas del Instituto Peruano de Economía (IPE), Víctor Fuentes, sostuvo que es de vital importancia que nuestro país aproveche dicha situación para insertarse en el nuevo ciclo de demanda de cobre mundial y por consecuencia continuar en la élite de producción cuprífera. “La transición energética hacia energías renovables y verdes va a permitir un nuevo ciclo de demanda del cobre que parece recién estar empezando. El actual ciclo que venía de la demanda de China todavía se mantiene, pero tenemos un nuevo ciclo muy grande sobre el cual el Perú tiene la posibilidad de insertarse”, expresó el experto de IPE durante el seminario denominado Minería y Desarrollo Sostenible organizado por la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (Comex Perú).

En ese sentido, Fuentes presentó una serie de proyecciones que estiman que al 2030 la demanda de cobre en el mundo se triplicará, situación que debe ser aprovechada por nuestro país. “La demanda del cobre va a estar fuertemente soportada por el crecimiento de la fabricación y producción de vehículos eléctricos, así como nuevas redes eléctricas, paneles solares y turbinas eólicas en construcción, que permitirá triplicar la demanda del cobre de dos a seis millones de toneladas métricas hacia finales del 2030. En ese panorama, la inserción de Perú tiene perspectivas bastante positivas”, explicó.

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Asimismo, destacó que nuestro país tiene la tercera mayor reserva de cobre del mundo por detrás de Chile y Australia, además de una cartera con 47 proyectos de inversión, solo por detrás de Chile (53) y superando a Brasil (38) y Argentina (34) a nivel sudamericano.

Ausencia de nuevos proyectos

No obstante, también apuntó que pese al nuevo súper ciclo de los precios de exportación actuales, no se han gatillado inversiones mineras similares a la de anteriores ciclos. “La ausencia de nuevos proyectos de gran envergadura se refleja en un menor ritmo de crecimiento de la inversión minera en el Perú en comparación con otros países mineros como Chile, Canadá y Australia”, manifestó.

Desempeño reciente del sector minero nacional

El representante de IPE también brindó información acerca del desempeño minero peruano en los últimos años, donde afirmó que hubo golpes muy fuertes relacionados a conflictos sociales, pero que la recuperación se encuentra en franco ascenso tras el inicio de operaciones mineras importantes.

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Recuperación minera

“Las últimas cifras indican que la minería se recuperó en febrero luego de un primer mes afectado por conflictos sociales y los indicadores adelantados del consumo de electricidad del sector minería estiman que la recuperación se consolidaría en marzo”, expresó.

Fuentes explicó que los posibles escenarios son influenciadas por el impacto de Quellaveco que inició operaciones a finales del año pasado y, en consecuencia, debido a la actualidad minera del Perú, se estima que buena parte del crecimiento del Producto Bruto Interno del 2023 será impulsado por el sector minero. “La recaudación minera constituye una de las principales fuentes de financiamiento de los gobiernos subnacionales. En el 2022 se transfirieron más de 10 000 millones de soles por conceptos de canon y regalías, el monto más alto del cual se tiene registro. Áncash, Arequipa, Ica y Tacna concentran el 62 % de estas transferencias”, concluyó.

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CIFRAS: Avances de la inversión pública

El IPE informó que la inversión pública registró un crecimiento de 7.4% en abril, impulsada por el buen desempeño de los gobiernos regionales (17.5%) y locales (22.0%) y que, a su vez, permitieron compensar la deficiente ejecución del Gobierno Nacional (-6.4%).

De esta manera, en los cuatro primeros meses del año, se tiene un avance acumulado de 7.4% respecto del mismo periodo del año anterior.

Al cierre de abril, se ha ejecutado el 18% del presupuesto anual 2023 para inversión pública, equivalente a S/70760 millones.

Los gobiernos subnacionales superan su tasa de avance del año pasado, a pesar de que el primer año de gestión de nuevas autoridades suelen presentar una menor ejecución.

A detalle el IPE señala diferencias significativas en el avance de la inversión pública al mes de abril: Junín, Loreto y Ayacucho destacan con una tasa de ejecución superior al 30%, mientras que Pasco y Áncash solo registran un avance del 7% de su presupuesto anual.


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