Por: Johana Herrera Sommerkamp
Muchas veces, ver los años pasar nos asusta. La palabra envejecer puede ser asociada con limitaciones tanto físicas como psicológicas. Sin embargo, estas limitaciones no son marcadas por un número o una etapa evolutiva “etapa del adulto mayor”, sino por nuestros pensamientos o salud física. Por ello, es importante tener un estilo de vida saludable desde un inicio.
Aquí les comparto algunas recomendaciones que podrían ayudar a llegar a esta etapa con una mirada y mente positiva:
- Monitorea tu salud física: siempre estate atento a tus controles médicos regulares y preventivos. De esta manera podrás detectar cualquier dificultad con tiempo y buscar alternativas de solución con los especialistas.
- Cuida tu mente: la salud mental también es importante. No temas pedir ayuda a un psicólogo para resolver dudas personales o compartir tus emociones. Para eso estamos.
- Mantente activo: realiza cualquier actividad física que te haga sentir cómodo. Siempre, respetado tu cuerpo. Esto ayudará a mantenerte saludable tanto física como psicológicamente. No olvides, consultar antes con tu médico y seguir sus indicaciones.
- Organízate: elabora rutinas para ordenar tu día y las tareas diarias. Esto te ayudará a sentir que tu día y tiempo son productivos.
- Socializa: mantente conectado con tus amigos y familiares. Además, puedes darte la oportunidad de tener nuevas amistades con personas de tu entorno. Inténtalo.
- Innova: atrévete a tener nuevas experiencias, dentro de tus posibilidades. Explora aquello, que alguna vez deseaste y no pudiste. No le pongas una edad a las actividades.
- Descansa: Dale a tu cuerpo el descanso que necesita tanto de noche como de día. Busca siempre irte a dormir con música relajante o una lectura. Evita las pantallas para que puedas conciliar mejor el sueño.
Recuerda que la etapa evolutiva ni la edad es el límite. Los límites son nuestros propios pensamientos.