La elevada desigualdad, vista a los ojos del mundo, deteriora el crecimiento económico al privar de sus beneficios a los que menos tienen. Una de las dimensiones para observar dicha brecha son las ganancias por sectores económicos.
El sector eléctrico, por ejemplo, tuvo un margen de ganancia de 94,7% en el 2016; una cifra que se mantiene en constante crecimiento desde hace 10 años, tal como se observa en la gráfica.
La razón de estas jugosas ganancias radica en que las empresas del sector demoran el traslado a los consumidores de la reducción de precios internacionales. Así lo explicó el economista de la Universidad Pacífico, Germán Alarco.
“Al ocurrir esto, el margen de ganancia del sector eléctrico aumenta”, dijo durante su exposición en el conversatorio “¿Qué ha pasado con la desigualdad en el Perú?”, organizado por la Universidad Pacífico.
Como se observa, dicho sector tiene márgenes altos y están por encima de la minería (76,3%).
La banca y el sector financiero están segundos en el ránking. “Y es que Perú pelea la segunda posición como el país de la región con un spread de tasas más alto”, aseveró Alarco.
La contraparte de esta realidad es el sector financiero, pues existen reducidos pagos a los ahorristas y altos cobros a los que reciben crédito. Un factor que incide aún más en la desigualdad.
Concretamente para este sector, Alarco propone que el Estado deba promover la banca del Estado. “Cofide tuvo en los 70 un rol importante. Lo mismo debe hacerse con el Banco de la Nación”, señaló.
En tanto, para solucionar el problema de desigualdad a nivel nacional, Alarco recomienda un nuevo consenso económico social. “Uno donde los trabajadores importen. Donde no solo sean los empresarios”, expresó.
En la misma línea se expresó el economista Bruno Seminario. “Se hace necesario diseñar políticas públicas. Es poco probable que la desigualdad disminuya si seguimos con una estrategia de crecimiento basada en sectores donde la participación del capital es 80%. Cosa que se sigue insistiendo. Se debe promover sectores que sean intensivos de mano de obra”, afirmó.
Además, puso énfasis en la desigualdad por regiones en el país. “Para cancelar estos efectos requerimos conceptualizar la infraestructura en el país. Sin esas políticas, será difícil controlar la desigualdad regional”, agregó Seminario.
Fuente: La República