Marco Arana, representante de Grufides: Conflicto en Conga pudo evitarse

Marco Arana, representante de Grufides.

El representante de Grufides, Marco Arana, conversó con ProActivo sobre el conflicto minero Conga y sobre el cambio del gabinete ministerial del gobierno de Ollanta Humala. (Cabe anotar que esta entrevista se hizo cuando aún no se levantaba el estado de emergencia decretado en esa región).

¿Qué opina sobre el cambio de ministros, bajo el escenario del caso Conga?
Tengo preocupaciones, espero que la solución de los conflictos socio-ambientales (como el de Conga) sea por la vía del diálogo, y no de la represión.
Espero que ahora (con Valdés) como primer ministro el enfoque sea distinto, que se generen condiciones de confianza. ¿Cómo se puede abrir un diálogo si congelas las cuentas al gobierno regional?, y si hay denuncias abiertas contra las autoridades. Se necesita reconstruir la confianza y creo que Valdés lo puede hacer, ahora que es premier.

¿Se consideran antimineros?
En Cajamarca no es tanto que haya una posición antiminera, tenemos a Gold Fields, y otras mineras con las que no hay problema, solo se pide que corrijan algunos temas. Yanacocha lleva 18 años en Cajamarca y el conflicto de ahora es por su expansión. No somos antimineros, sino que hay una empresa que es anticajamarquina, que ha generado destrucción de fuentes de agua, denuncias judiciales contra autoridades; y quiere imponer su ley.

¿No le parece muy fuerte llamar a Yanacocha anticajamarquina?
¿Como se le puede llamar a una empresa que ha dejado sin agua a Cajamarca, porque ha terminado con las lagunas Yanacocha, San José, Maqui Maqui, Pato y Corazón?
Hoy recibimos aguas bombeadas de mala calidad que los cajarmarquinos pagamos, estamos endeudados por 6 millones de dólares para modernizar nuestra planta de tratamiento de agua y los costos han subido. ¿Esto se puede llamar responsabilidad empresarial?

Ustedes están contra la expansión de Yanacocha.
En el caso de Yanacocha, lo que hay que discutir es el cierre de minas, ya que dicen que tienen operaciones para 7 u 8 años más. ¿Qué pasará con sus trabajadores? ¿cómo dejan el tema de las relaciones comunitarias? ¿cómo se gasta mejor el dinero del canon para que la gente pueda vivir más allá de la actividad minera?, ¿cómo se resuelven los impactos sobre el agua? Y también hay que discutir ¿qué nuevas operaciones mineras pueden ir?

Entonces ¿su postura no es contra la inversión minera, sino cómo se haga?
El conflicto de Conga pudo haberse evitado, los frentes de defensa y el gobierno regional pidieron revisar el EIA y el ministro de Energía y Minas respondió que no se podía porque era cosa juzgada.
Cajamarca pide diálogo desde el 2004, cuando la municipalidad de Celendín pidió no tocar las lagunas, estamos en el 2011 y no se abordó ese problema con seriedad, sino que se enjuició al alcalde y se le cambió por uno con el que firmaron un convenio. Siete años después, el conflicto ha explotado.

De acuerdo con el informe de la policía, sí hubo actos de violencia en un campamento.
Fue un caso aislado, en la Encañada donde está el proyecto hubo un enfrentamiento el 9 de noviembre, que dañó la maquinaria, y habría que sancionar a los responsables.