Mariela García, CEO de Ferreycorp.
Mariela García, CEO de Ferreycorp, confía en la reactivación económica delas organizaciones de su sector en medio de la pandemia y asegura que es vital mantener una comunicación empática con los trabajadores en pro de su salud y del cumplimiento de los objetivos laborales.
¿Cuánto afectó La cuarentena a Ferreycorp?
La cuarentena nos afectó completamente, nuestra actividad no es esencial, así que estuvimos cerrados desde el 16 de marzo hasta el 18 de mayo. Solo un 5% de Los colaboradores en Perú atendió a sectores esenciales que requerían algún mantenimiento en sus equipos o recepcionó carga internacional que llegó en cuarentena.
Nuestros clientes bajaron mucho sus niveles de actividad, tanto en la minería como en La construcción. Es así que en el momento más difícil de la cuarentena, nuestros ingresos fueron del 30%-40%.
¿Cuáles son las principales estrategias que están aplicando para reactivar sus actividades?
Durante las semanas de cuarentena mantuvimos al máximo las actividades susceptibles del trabajo desde casa, como Las áreas comúnmente llamadas “backoffice”: recursos humanos, finanzas y comercial.
Las empresas de la corporación estuvieron muy cerca de sus clientes, conversando con ellos, entendiendo cuánto los había frenado la cuarentena, escuchando sus planes futuros, actualizando bases de datos, llevando capacitación y dejando mensajes de aliento frente a la compleja situación que vivía el país. Es así que cuando llegaron las fases 1 y 2, en las cuales entraron la mayoría de sectores que atendemos, comenzamos a desplegar campañas para ayudarlos en el retorno: por ejemplo, muchas máquinas podrían necesitar mantenimientos y repuestos para volver a operar.
También hemos enfatizado mucho en nuestras capacidades de comercio electrónico: nosotros podemos recibir órdenes de compra y procesar el crédito, así como la entrega de los productos, sin que los clientes tengan que venir a nuestros locales.
De la misma manera, concretamos algunas operaciones financieras, entre ellas una colocación de bonos internacional para contar con recursos a mediano plazo y así asegurar la liquidez que un escenario incierto (como el actual) requiere.
¿Cuáles son las áreas de negocio que han sido más golpeadas y cuáles se mantienen fuertes?
Nuestras actividades en gran medida requieren de la presencia física de nuestros colaboradores. El corazón de nuestro negocio está en recibir la maquinaria que viene del exterior y prepararla para la entrega a nuestros clientes, así como en dar mantenimiento y reparación a los equipos que ya están en poder de nuestros clientes. Estas líneas de negocio vienen restableciéndose gradualmente desde mediados de mayo. De los sectores económicos que atendemos, todos fueron golpeados de manera significativa; hoy podemos decir que están de vuelta con un 70% de actividad en promedio.
¿A pesar de la crisis sigue siendo un sector sostenible? ¿Cómo ve el panorama en el corto y mediano plazo?
Por supuesto que este es un sector sostenible. La creación de infraestructura en el país y actividades como minería, agricultura y pesca seguirán desarrollándose en el Perú, y con ellos, el uso de maquinaria y el servicio experto que requieren; nosotros seguiremos contribuyendo a que estos sectores eleven su productividad y eficiencia gracias a los equipos que comercializamos y los servicios posventa que ofrecemos en todo el país, incluso en los lugares más remotos y bajo estándares muy exigentes.
Como muchos han señalado, las inversiones en minería y en infraestructura tienen un alto potencial para dinamizar la economía del país, y nosotros somos aliados estratégicos de esos sectores. De hecho, la actividad en minería ya está en el orden de 70% y la de infraestructura un poco por detrás, pero con mucha expectativa para las semanas que vienen.
¿Considera que las empresas de larga trayectoria cambiarán mucho su manera de hacer negocios en el Perú?
La cuarentena ha acelerado el cambio. Creo que seguirán digitalizándose muchos procesos de atención a clientes. De la misma manera, el formato de trabajo con horarios únicos y en oficinas ha sido alterado para siempre hacia fórmulas mixtas. Creo que sería bueno que se siga contando con espacios en oficinas para hacer reuniones presenciales, pero creo que la rigidez de trabajar siempre desde la oficina ya no va a regresar.
El hecho de trabajar en remoto o en fórmulas mixtas hará posible aprovechar talento especializado de otras regiones o países, y se irá a equipos más plurales e interdisciplinarios.
¿Las empresas que se han conformado en esta crisis tienen futuro?
Yo creo que tendrán futuro en la medida que estén atendiendo una necesidad que va a ser permanente, o hayan adoptado un modelo de negocio que sea sostenible.
¿Cómo aplicar bien el liderazgo y qué capacidades se requieren para manejar equipos en esta coyuntura?
El líder tiene algunos roles que son más importantes que nunca en esta coyuntura. En primer lugar: inspirar la visión y mirada de largo plazo. En un entorno tan incierto y cambiante como el de esta pandemia, la visión y el propósito que inspira el líder es vital para llevar tranquilidad y cohesión al equipo. Otro rol es el de poner objetivos retadores y realistas. Todos los líderes hemos tenido que revisar los planes que nos habíamos definido para el año a tan solo 3 meses de haber iniciado un año que pintaba bien. La agilidad para revisar las metas y definir los planes para llegar a ellas así como la flexibilidad para seguirlos, ajustando de ser el caso, se tornan más importantes. Otro factor esencial del liderazgo es la comunicación.
Yo diría que en esta coyuntura se ha multiplicado la necesidad de llevar más comunicación, empática y directa, apoyándonos en los medios digitales para favorecer el alcance y la continuidad, con el objetivo de transmitir la importancia de trabajar en equipo, con seguridad y poniendo el máximo esfuerzo. Ha sido muy importante que los colaboradores a lo largo de estos ya 5 meses reciban información de manera frecuente sobre cómo la crisis nos ha impactado, cómo el equipo de líderes ha replanteado los objetivos y planes, y cómo cada uno puede contribuir para su logro.
En esta coyuntura también ha sido importante que los líderes entiendan que su rol trasciende a la agenda de la empresa. Todos hemos entendido que desde la empresa también podíamos contribuir a hacer un llamado para cumplir las medidas de prevención y cuidado que el Gobierno decretó. Nuestra comunicación ha incluido mensajes de #yomequedoencasa, #yomantengodistancia y otros afines para promover el cambio cultural que esta campaña de prevención y control del virus supone.
¿De qué manera tas empresas de su sector u otros sectores pueden apoyar a sus clientes a mitigar el impacto de la crisis?
En nuestro caso, una manera es ayudarlos a activar las flotas de equipos, dándoles el mantenimiento que requieran para regresar a operaciones, tener a la mano inventarios de repuestos para dichas reparaciones, contar con maquinaria disponible para venta en la medida en que se lanzan nuevos proyectos de construcción de infraestructura, entre otros.
También atendiendo refinanciaciones que les den algo de liquidez en la medida de nuestras posibilidades. Otro mecanismo es atender sus pedidos de manera remota, sin que tengan que desplazarse a nuestras instalaciones, y capacitar a sus colaboradores de manera remota sobre la operación de los equipos que comercializamos.
¿En esta difícil situación se han dado oportunidades para optimizar procesos u oportunidades de negocio? (Teletrabajo, pagos oniine, etc.)
Las empresas de la corporación habían adoptado hace algunos años la suite de aplicaciones de Google, por lo cual tenemos la posibilidad de reunimos en remoto y estar conectados de manera constante. También podemos realizar una serie de procesos en remoto ya que tenemos servidores en la nube. Muchos procesos de tesorería fueron digitalizados hace muchos años gracias a plataformas dedicadas de los bancos. En la empresa adoptamos SAP para los procesos financieros y contables también hace algunos años, pudiendo acceder de manera remota.
¿El Covid ha evidenciado la falta de previsión a futuro de las empresas?
Creo que parte de prevenir el futuro está en aprender del pasado y saber aprovechar experiencias del pasado para responder a situaciones imprevistas. Si bien esta crisis no fue prevista, sí se ha podido aprovechar algunas experiencias del pasado para reaccionar y tomar medidas rápidas. Definitivamente hoy también nos quedarán aprendizajes para situaciones extremas en el futuro.
No tengo duda que con esta crisis se han desarrollado capacidades de resiliencia, de manejo de incertidumbre, de trabajo en equipo y de actitud a favor del cambio y la innovación.
Fuente: Revista APERHU