carga. Ampliación del Puerto cuesta cerca de 300 millones de dólares y recibirá la carga de las minas Cerro Verde, Las Bambas y Antapaccay. A través de un moderno sistema de fajas de transferencia de 3.5 kilómetros embarcará concentrados de cobre para llevarlos al extranjero.
El puerto de Matarani, fue construido en 1941 en el distrito de Islay, en la provincia del mismo nombre, con la finalidad de recibir toda la carga de exportación que se tenía, en el sur del Perú y países vecinos como Bolivia.
Desde sus inicios, los minerales fueron el principal producto que exportó. A 74 años de su creación, el desembarcadero busca convertirse en el principal puerto de envío de metales del país.
Para lograr su objetivo desde febrero del año pasado se inició la construcción de un nuevo muelle de 260 metros de largo, dedicado exclusivamente a la exportación de concentrado de cobre de las minas Antapaccay, Cerro Verde y Las Bambas.
El Terminal Internacional del Sur (Tisur), concesionario del puerto, invierte en estas obras cerca de 300 millones de dólares. El gerente de ingeniería de Tisur, Diego Cassinelli Montero, explica que con esta ampliación, el volumen de carga del puerto llegará a 5 millones de toneladas (Tn) en 2016. “Actualmente el puerto maneja 3.5 millones de Tn. El año pasado registramos 3.4 millones Tn”, dijo.
FUNCIONAMIENTO
El nuevo puerto de Matarani, contempla la construcción de un muelle, además de tres almacenes para cada una de las empresas mineras y la implementación de fajas especiales, que permitan el traslado de los metales.
La estructura más adelantada es la de Cerro Verde. Tiene un capacidad de 150 mil Tn para su concentrado de cobre que llega a través de líneas férreas.
Cassinelli, explica que mediante un moderno sistema de fajas receptivas, transportadoras y de almacenaje de más de 3.5 kilómetros, el mineral será llevado al muelle para su depósito en barcos de hasta 50 mil toneladas.
Cerro Verde, tendrá dos fajas de recepción. Recibirán el mineral de los vagones del tren y lo echarán sobre dos tolvas de carga que verterán el mineral sobre otras cintas que lo conducirán hasta el almacén.
“El mineral cae continuamente desde lo alto del almacén, pero no produce polvo pues viene húmedo”, explica el funcionario.
Luego, a través de cuatro cargadores frontales el concentrado acumulado en rumas será depositado en una tolva que reparte el mineral a lo largo de otra faja, esta lo llevará hasta otra cinta en común para todas las empresas. Esta última está herméticamente cerrada de manera tubular para que los restos de mineral no salgan al exterior.
Ya en la zona de embarque un equipo denominado Shepplover (grua), ubicado en lo alto del muelle, inicia el embarque a las bodegas de los barcos.
OPERACIÓN
El Puerto de Matarani, exporta concentrados de mineral de la macrorregión sur, cátodos de cobre y contenedores con una diversidad de productos de pequeños exportadores de cebolla y borato de las regiones del sur.
“Somos la puerta de entrada y salida de la carga boliviana, a ellos les ayudamos con la exportación de soya y la importación, en algunos casos, de maíz, trigo y bobinas, fierros de construcción y planchas de acero”, sostiene Diego Cassinelli Montero.
Actualmente, el puerto de Matarani, tiene un volumen de carga de concentrados de mineral que llega a 1 millón 700 mil, lo que representa el 50% de la carga total del puerto. Con la edificación del nuevo puerto se estima duplicar la capacidad actual de embarque.
La República