Gestión Integral de la Calidad del Aire

  • Tendrá un enfoque regulatorio y de incentivo económico, informan.

El Ministerio del Ambiente (Minam) elabora una norma legal con el objetivo de mejorar la calidad del aire en nuestro país, la cual tendrá un enfoque integral basado en un enfoque regulatorio (directo e indirecto) y diferentes tipos de incentivos.

Se informó que desde la Dirección General de Calidad Ambiental (DGCA) se trabaja en colaboración con la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) la prepublicación del Proyecto de Ley Marco para la Gestión Integral de la Calidad del Aire, de acuerdo con los procedimientos establecidos para estos casos. Será la primera de su tipo que se aplicará en el Perú.

Ver también:  MINAM reconoce a Cosapi Minería por su compromiso con la sostenibilidad ambiental

Esto permitirá revertir la situación de deterioro de la calidad del aire en espacios rurales y urbanos, “producida por actividades que generan emisiones atmosféricas contaminantes”, problemática que fue consignada en la Agenda Temprana del sector publicada el 30 de enero del 2023 (Resolución Ministerial N° 032-2023-Minam).

En el marco del Análisis de Impacto Regulatorio (AIR Ex ante), se desarrolla la consulta pública temprana, mediante una campaña a escala nacional, que busca obtener información sobre la percepción de la calidad del aire y diversos aspectos que involucran su gestión.

Combustible limpio

Por otro lado, se informó que el Minam también impulsa el uso de combustibles más limpios (migrar del Euro IV a Euro VI, por ejemplo), la renovación vehicular (chatarreo y limitaciones por antigüedad), movilidad sostenible (electromovilidad, uso de bicicleta), mejoras en el sistema de inspección vehicular, reconversión de vehículos (diésel/gasolina a GNV/GLP) y la transición hacia una matriz energética menos contaminante.

Ver también:  Minera Condestable apoya proyectos de econegocios y ecoturismo en Mala

Estas acciones se enmarcan dentro de los objetivos de la Política Nacional del Ambiente al 2030, que establece la necesidad de reducir la pérdida de la biodiversidad, los niveles de deforestación y la contaminación del aire, agua y suelo; y mejorar la gestión de los residuos sólidos.