La industria de exploración minera cobra vida. Después de un lustro de crisis, en el cual la mitad de las compañías exploradoras abandonó el mercado (hubo más de 120 explorando el país en el cenit del ‘boom’ minero), el sector vuelve a mostrar signos de recuperación.
Muestra de ello es el ligero incremento de la inversión en exploración minera, que anotó US$50,7 millones en enero-febrero del 2017, 12,3% más que en igual período del 2016, según el Ministerio de Energía y Minas.
“Pero el mejor indicador es que los contratistas y proveedores de servicios de exploración están ahora muy ocupados. Igual ocurre con los geólogos, que estuvieron sin empleo muchos años”, apunta Eugenio Ferrari, presidente del congreso de exploración ProEXPLO 2017.
ENTORNO FAVORABLE
Según Ferrari, esta dinámica es posible porque los precios de los metales han mejorado y los inversionistas vuelven a ver los commodities mineros con buenos ojos.
Pero también hay otros factores. Uno es el atractivo geológico del Perú, que alberga una amplísima gama de metales (a diferencia de Chile, que solo destaca por el cobre), y el otro es la mejora en las tecnologías de exploración minera.
“Ahora, la geofísica puede detectar yacimientos hasta una profundidad de 600 metros. Con eso le estamos diciendo a los inversionistas que no importa todo lo que se haya explorado con los métodos antiguos, hoy se puede duplicar el espectro de búsqueda”, indica Ferrari.
Miguel Cardozo, presidente de la minera junior Alturas Minerals, concuerda en que las condiciones vuelven a conjugarse para atraer a los inversionistas de riesgo.
“Prueba de ello es que en Alturas hemos colocado tres proyectos en el último año: Huajoto (con Milpo), Sombreo (con Auryn Resources), y ahora estamos evaluando ofertas por Utupara”, apunta el geólogo.
NUEVOS PROYECTOS
Otro indicador poderoso de que la minería junior vuelve con fuerza es el hallazgo de nuevos yacimientos, que pueden constituir la próxima generación de proyectos mineros.
Según Ferrari, se trata de modelos novedosos, que destacan sobre los proyectos mineros (generalmente de antigua data) que se exploraron en el ‘boom’ minero.
“Esos proyectos no salieron adelante porque sus leyes eran marginales. Así que, revisar un proyecto antiguo solo porque los precios suben no es una buena señal”, apunta.
Por esta razón, Ferrari hace hincapié en nuevos descubrimientos, como Ayawilca (Tinka Resources), el primer hallazgo de estaño en el centro del país.
También, Pecoy y Tororume (Pembrook), dos pórfidos de cobre que abren la posibilidad de descubrir megayacimientos de cobre más al norte de Arequipa, hasta la región Lima y más allá.
Y, del mismo modo, Antakori (Regulus), Yumpag (Buenaventura), Quicay 2 (Centauro), Quecher Main (Yanacocha),Taucane (Minsur), entre otros.
Fuente: El Comercio