Diez dragas en operación, varias comunidades indígenas perjudicadas con restos de mercurio en el agua y hasta un ex funcionario municipal involucrado es el balance más reciente de la minería ilegal en el río Santiago, ubicado en la quebrada Pastacillo, en la región Amazonas. La web de noticias ambientales Mongabay Latam expuso esta semana el problema social y ecológico que se vive en el lugar desde hace cinco años.
En la segunda semana de junio, un grupo de autoridades municipales del distrito de Río Santiago llegó a Pastacillo para comprobar que pese a las dos operaciones de interdicción (incautación y destrucción de maquinaria de los mineros ilegales) realizadas por el Gobierno Central y a los intentos de la población de retirar a estas personas, la minería ilegal se sigue expandiendo con el uso de dragas y mercurio. Hasta el momento se calcula una deforestación de cerca de 20 hectáreas.
Como en otros lugares donde se realiza minería ilegal, la actividad nunca se detiene: las dragas trabajan bombeando el bosque y el río las 24 horas y hay dos turnos de trabajo de 12 horas. Segundo Pezo, el jefe de ronderos de Galilea, comunidad que alberga la sede del municipio de Río Santiago, aseguró que en los últimos meses han llegado a trabajar a Pastacillo personas que han hecho este tipo de actividad ilícita en Puerto Maldonado (Madre de Dios) y Saramirisa (Loreto). En simultáneo, los casos de robos, delincuencia y consumo de drogas han aumentado en esta zona.
La fiebre del oro es una de las variables que han influido en el alza de esta actividad ilegal hace cinco años. Aunque los precios han bajado, la ganancia diaria sigue siendo rentable frente a las actividades tradicionales como la agricultura o la pesca. Dependiendo de lo obtenido por los trabajadores, pueden obtener por turno entre S/150 a S/300.
-Un problema sin resolver
Aunque este delito existe hace cinco años, no ha habido una acción de sanción ni investigación para identificar a los responsables. Tanto el Ministerio Público como la Dirección Regional de Energía y Minas de Amazonas han sido notificados del problema por la población y las autoridades de Río Santiago, pero no se ha avanzado con celeridad para detenerlo.
Mongabay informó que la Fiscalía Especializada en Medio Ambiente (FEMA) de Bagua recibió hace más de un año una carta tanto del gobernador distrital, del presidente del Gobierno Territorial Autónomo de la nación Wampís, del jefe de la ronda comunal y del juez de paz de Río Santiago, donde se le pedía intervención. El fiscal Jorge Luis Trigoso, encargado de la FEMA de Bagua, aseguró que pronto se realizarían audiencias de control de acusación fiscal y que se están investigando tres casos.
En tanto, el director regional de Energía y Minas de Amazonas, el economista Mario Ramos, indicó que su entidad está enfocada en la formalización minera y que recién habían sido informados de esta actividad ilegal en el Río Santiago en diciembre del 2016. “Hemos programado inspecciones para este año”, señaló aunque no precisó fechas.
En la reciente visita realizada por las autoridades distritales, encontraron diez dragas y dos de ellas fueron identificadas como propiedad de Julio López, gerente municipal de Medio Ambiente hasta mayo pasado. El alcalde de Río Santiago, Mateo Impi, aseguró que habría una sanción ejemplar para este empleado, aunque dijo que no podría despedirlo por temor a represalias.
Fuente: El Comercio