Cada año, los habitantes de las zonas altoandinas del Perú sufren las inclemencias de las bajas temperaturas. Buscando combatir esto, el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) tiene como meta entre 2019 y 2020 construir 25 mil viviendas bioclimáticas, como parte del Programa Nacional de Vivienda Rural.
“El costo de las viviendas es de 30 mil soles en promedio. 2600 soles constituye el aporte del beneficiario en forma de trabajo, y el Ministerio hace la transferencia del resto”, indicó Iván Ramos, director del Programa Nacional de Vivienda Rural del MVCS, en el Jueves Minero, organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).
Sostuvo que estas viviendas, denominadas Sumaq Wasi, tienen como objetivo no solo dar abrigo a los pobladores, sino también articular la actividad productiva y la educación familiar. Uno de sus aspectos técnicos importantes es reducir el hacinamiento gracias a espacios propios para los niños, necesario para el actual escenario de pandemia.
Por otro lado, actualmente se ha contemplado una “iniciativa” con la participación de la Academia y el sector privado para el desarrollo de un sistema que complemente y mejore el nivel de confort térmico de estas viviendas, enfocadas en el Plan Multisectorial de Heladas y Friajes.
“Se busca que la gente pueda gestionar la ejecución del proyecto e incluso puedan ellos mismos construir las viviendas y de esa manera hacerla sostenible”, añadió.
Sistema térmico
La iniciativa consiste en un sistema térmico sostenible para las casas, refirió Carlos Alarco, de Bechtel Corporation, el cual tiene una primera etapa de diseño en casas piloto en Lima y luego en condiciones reales en Cusco y Puno. Y una segunda de ejecución de gestión PMO con la cual se espera generar grandes beneficios.
Julio Guerreo, experto internacional en sistemas térmicos de Cambridge R&T, mencionó que este sistema térmico implica una solución que inserta energía dentro de las viviendas a través de un sistema CAT (Colector, Acumulador y Transformador) para evitar que la temperatura al interior de las casas se iguale a la externa y para que permanezca con calor por más tiempo.
Explicó que el sistema consiste en un colector, que es una caja de madera que capta la energía solar, la cual luego es transferida durante la mañana hacia una caja de piedras que acumula la energía térmica, como si fuese una batería. En la noche se abre otro que inserta la energía de la caja de piedras a la casa.
Bill Worek, experto internacional en sistemas térmicos de Cambridge R&T, resaltó que la belleza de este sistema es que siendo un fenómeno físico complejo, resalta por la simplicidad de sus componentes de fácil acceso en la zona y que da una mayor calidad de vida a los beneficiados.
Por su parte, Sandra Vergara, del Grupo de Apoyo al Sector Rural de la PUCP, resaltó la importancia de la transferencia tecnológica a los beneficiarios a través de programas de capacitación y material didáctico, así como una certificación que los califique para que los mismos beneficiarios puedan desarrollar esta tecnología.
En la jornada también participaron Mauricio Rodríguez, exgobernador regional de Puno; y Marco Casas, director de El Diario de Cusco, quienes resaltaron la sostenibilidad de este proyecto rural impulsado por el gobierno en coordinación con el sector privado y la academia.
Fuente: IIMP