MICHAEL MURPHY, Líder de Tecnología y Servicios de New Zealand Trade and Enterprise, habla sobre el balance que debe existir entre el compromiso por el medio ambiente y los negocios prósperos.
El sector tecnológico viene creciendo de manera interesante en Nueva Zelanda, lo cual repercutirá positivamente en sus exportaciones y el sector minero. Así lo señaló Michael Murphy, Líder de Tecnología y Servicios de New Zealand Trade and Enterprise, en el webinar “Nueva perspectiva desde Nueva Zelandia”, organizado por ProActivo y la mencionada firma.
“En el sector tecnológico existen más de 23 mil empresas que emplean a más de 114 mil personas. En la barrera de exportaciones están en más de 10 mil millones de dólares. Esto representa un 5% de nuestra fuerza laboral y un 9% de nuestras exportaciones. El sector de tecnología fue el segundo más grande para las exportaciones en el 2021. Las exportaciones digitales han crecido un 23% el año pasado”, afirmó Murphy.
Murphy agregó que Nueva Zelanda es un país estable y con apertura que permite depositar confianza. “Utilizamos química inorgánica libre de carbono para convertir los residuos industriales en materias primas. Hay otras empresas que fabrican sensores que ayudan a detectar el riesgo crítico y pueda ayudar a los trabajadores que operan equipos pesados. Estos son solo algunos ejemplos de las empresas neozelandesas que hacen y tienen muy buenas soluciones tecnológicas”, contó.
Asimismo, Murphy explicó que su empresa trabaja bajo la influencia de la perspectiva de la cultura indígena Maori, con el objetivo de preservar el medio ambiente y la naturaleza mientras llevan a cabo sus operaciones. “La visión Maori tiene un set de principios para guiarnos.
Guardianía y compasión son dos de los elementos principales de la cosmovisión Maori. El primero tiene que ver con cuidar la tierra, el territorio, el cielo, etc.
Esto tiene también responsabilidades, nos inspira a pensar en las generaciones futuras. El segundo tiene que ver con la compasión entre las personas y la naturaleza. Tiene que ver con ayudar a alguien que lo necesite y también se aplica para un contexto de negocios y de accionistas”, dijo.
Murphy se preguntó ¿Cómo se traduce todo esto al mundo minero? y se respondió así mismo explicando que primero expandieron su propuesta de valor a no solamente trabajar con minería sino también a ampliar sus recursos y energía. “Hay empresas bastante interesadas en aplicar nuestras tecnologías. Vemos, sin embargo, que hay un punto en común muy importante: cuidar de nuestras personas y nuestro lugar. Queremos tener una economía que sea líder y que pueda emerger de manera sólida. Queremos mantenernos en armonía con el medio ambiente y poder usar correctamente los recursos y mantenernos competitivos”, indicó.
“Tenemos gran interés en poder liderar los mercados tratando bien a la naturaleza, esa es una mejor minería. Nosotros tenemos este enfoque que nos permite minimizar el uso de recursos en las operaciones mineras. Queremos explorar otras maneras de poder reducir el impacto medioambiental y poder maximizar la rehabilitación del sector minero a nivel global. Tenemos en cuenta una perspectiva, social, medioambiental, económica y cultural. Esa es la manera en la cual nosotros nos expresamos y trabajamos”, agregó.
Esta nota es parte de la edición N° 210 de la Revista ProActivo. |