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El Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público, Ositrán, obtuvo la certificación del ISO 37001:2016 “Sistema de Gestión Anti-Soborno”, que garantiza su desempeño con medidas y controles que le permitan prevenir, detectar y enfrentar el soborno.
El organismo regulador señaló que con dicha certificación avala su compromiso en la lucha contra la corrupción y la mejora continua de sus procesos internos para combatir este delito; así como la implementación de buenas prácticas globales para la identificación, evaluación y tratamiento de este tipo de actos.
La presidenta del organismo regulador, Verónica Zambrano, manifestó: “la transparencia es la base de nuestro trabajo y sobre todo en el sector donde nos encontramos por todos los problemas de corrupción que lamentablemente hemos tenido que afrontar en gestiones anteriores. Nos comprometemos a seguir trabajando en la lucha contra la corrupción y mejora continua de nuestros procesos, con el fin de brindar un mejor servicio a todos los peruanos”.
Patricia Siles Álvarez, presidenta del Consejo Directivo de Basc Perú, felicitó al Ositran por el Sistema de Gestión Antisoborno con el que trabaja. “La corrupción es un grave problema en el país. Según la Defensoría del Pueblo el Perú pierde cada año más de 5 millones de dólares por actos de corrupción cometidos por funcionarios públicos. Consideramos esta certificación un gran paso que está dando el Ositrán al contar con un sistema antisoborno y al comprometerse en establecer una cultura de integridad, transparencia y lucha contra la corrupción”, afirmó.
LECCIONES APRENDIDAS
En los últimos años, el organismo supervisor asumió el compromiso de luchar contra la corrupción y por ello ha implementado diversas prácticas y mecanismos de mejora, tales como la aprobación de una Política de Gestión Antisoborno, que prohíbe el soborno bajo cualquier modalidad y expresa el compromiso de cumplir con los requisitos legales y reglamentarios aplicables dentro de la institución.
El Ositrán informó que alcance de la certificación incluye procesos propios de la misión de la entidad, clave para asegurar la estabilidad institucional y la integridad en sus operaciones; por lo que estableció: “Normativas en la gestión de recursos humanos y en gestión logística para dar cumplimiento al proceso de debida diligencia en el personal como en los proveedores, asimismo, se han incluido cláusulas de anticorrupción en todos los contratos, ordenes de servicio y órdenes de compra que tiene a cargo la entidad, tomando especial tratamiento en la verificación de las prestaciones, en los informes de conformidad; y se han implementado mejoras en los procesos de selección y contratación del personal, incluyéndose funciones antisoborno para todo el personal de la entidad”.
Además, con el objetivo de articular esfuerzos en la prevención y lucha contra la corrupción, el regulador envío cartas de Compromiso Ético a los concesionarios y empresas supervisoras invitándolas a comprometerse con esta labor. Y también ha establecido canales de comunicación para la recepción de denuncias sobre actos de corrupción; con mecanismos para su debida atención.
Asimismo, señala que en el informe anual de desempeño a la Comisión de Defensa del Consumidor y Organismos Reguladores del Congreso de la República, incluirá la evaluación de los controles antisoborno implementados.
La oficina estatal resaltó que todo ello es parte de los esfuerzos para mejorar sus mecanismos de transparencia y de rendición de cuentas, “acorde a con las buenas prácticas de gobernanza propuesta por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE)”.
