En el marco del evento “Mujeres en minería”, Pablo Saravia, socio y líder del sector Minería en PwC, compartió una reflexión sobre los avances, desafíos y perspectivas en torno a la participación femenina en la industria minera.
Con más de 25 años de experiencia en el rubro, Saravia recordó sus inicios en PwC en 1995, cuando el entorno minero era marcadamente masculino. “No me permitían incluir a mujeres en los equipos que viajaban a las unidades mineras. Había un celo, se decía incluso que ‘la mina es celosa y deja de dar frutos’ si hay mujeres”, relató en el evento organizado por Las Bambas. Sin embargo, reconoció que estos prejuicios han ido quedando atrás con el tiempo, aunque el cambio ha sido lento.
Según Saravia, a pesar de los avances, las cifras a nivel global siguen mostrando una baja representación femenina en cargos de liderazgo dentro de las principales empresas mineras del mundo: “Nuestros estudios muestran que, en las 40 megacompañías mineras más grandes del planeta, la presencia de mujeres en cargos como CEO o director no supera el 11 o 12%”.
Para revertir esta situación, Saravia enfatizó la necesidad de persistir en los esfuerzos de inclusión, comenzando desde la educación en edades tempranas. “Tenemos que enseñarles a los niños y niñas que todos tenemos las mismas oportunidades. Es una tarea de todos, hombres y mujeres”, afirmó.
Además, destacó la importancia de la meritocracia como pilar fundamental en el camino hacia la equidad de género. “Independientemente del género, debe primar la meritocracia. Pero eso tomará tiempo, quizás dos o tres décadas si comenzamos hoy”.
Finalmente, Saravia señaló que en otros países la conciencia sobre el rol de la mujer en minería está más desarrollada, gracias a programas estatales y corporativos que se replican en sus subsidiarias alrededor del mundo. “Esos programas incluyen métricas anuales que permiten medir la evolución en las oportunidades para las mujeres dentro del sector”, concluyó.