campamento del lote 8 (PPN)

  • Los actos vandálicos dejaron inoperativos equipos del sistema de seguridad, de detección de fuga de los oleoductos y los equipos computarizados que controlan la electricidad de las instalaciones y de Villa Trompeteros.
  • Debido al retiro del personal en resguardo de sus vidas, existe el peligro de que se produzca un daño ambiental al rebalsarse las piletas API por las lluvias en la zona.
  • Declaraciones realizadas públicamente por Perupetro han contribuido a generar un clima de alta conflictividad social. PPN en Liquidación mantiene su compromiso de cumplir con sus acuerdos con las comunidades.

Una semana después del inicio de los actos vandálicos ocurridos en el campamento del Lote 8, PPN EN LIQUIDACIÓN informa que el orden y la paz social no ha sido reestablecido en la zona.

Como la empresa denunció en un comunicado anterior, un grupo de personas ajenas a la operación realizaron actos delincuenciales en el campamento Percy Rozas del Lote 8, ubicado en Loreto, hiriendo de bala a miembros de la policía y personal de seguridad.

La empresa implementó de inmediato los protocolos de seguridad para desmovilizar a su personal con el objetivo de resguardar la integridad, vida y salud de sus colaboradores, y solicitó la intervención de las autoridades para que presten las garantías necesarias para el resguardo de bienes, lo cual hasta el momento no ha sucedido.

Durante los actos vandálicos, los equipos del sistema de seguridad y de detección de fuga de los oleoductos han quedado totalmente deshabilitados. Asimismo, los equipos computarizados fueron sustraídos, con lo cual dejaron de funcionar los generadores que proveen electricidad a las instalaciones y a Villa Trompeteros. Los daños en el centro de operaciones son cuantiosos y, por la ausencia del personal, todavía no se ha podido evaluar cuánto tiempo tomará restablecer la funcionalidad de este.

A esto se le suma un grave peligro: en las instalaciones existen piletas API, que contienen agua de lluvia y restos de hidrocarburo. Este líquido, en situación regular de operación, es reinyectado a los reservorios de donde provino. Sin embargo, debido a los conflictos sociales ocurridos, ello no se ha podido realizar. Es así que, en caso de lluvias en la zona, el líquido podría rebalsarse y dañar el medio ambiente, incluso podría llegar al río Corrientes. La falta de energía eléctrica y la desmovilización del personal del campamento –en resguardo de su integridad física y por la falta de garantías– hacen que la empresa no pueda tomar acciones para afrontar este riesgo, por lo que no puede asumir responsabilidad por el mismo.

Cabe destacar que las declaraciones realizadas públicamente por Perupetro en diversos medios de comunicación en relación con la vigencia del Contrato de Licencia del Lote 8, han contribuido con un clima de alta conflictividad social. Hasta la propalación de dichas declaraciones, el proceso de liquidación de PPN se estaba llevando a cabo de manera ordenada, los recursos de la compañía estaban siendo destinados al cumplimiento de sus obligaciones contractuales, regulatorias y a los compromisos con las comunidades.

PPN EN LIQUIDACIÓN vuelve a hacer un llamado a las autoridades para que restablezcan el orden y la paz social en la zona. Solo contando con garantías del Estado que salvaguarden la salud e integridad física de nuestros empleados y de nuestros contratistas, se podrá volver al campamento para retomar el control de la operación –incluyendo el cuidado del medio ambiente– y reestablecer el fluido eléctrico del mismo campamento y de Villa Trompeteros.