Las tensiones geopolíticas entre Corea del Norte y EE.UU. siguen moviendo los mercados.
Así, el precio del oro continúa su tendencia al alza y trepó el martes a máximos de un año.
El metal precioso fue impulsado por una caída del dólar y por la demanda como “activo refugio” en medio de la incertidumbre por los ensayos nucleares de Corea del Norte.
Buena parte de la reciente fortaleza del oro puede ser atribuida a la salida de activos considerados de riesgo debido a la incertidumbre geopolítica que se agudizó por los eventos en la península coreana, señaló un analista a Reuters.
Ayer, luego de haber tocado un techo de USS 1,344.2 la onza, el oro al contado cerró en USS 1.341.8, ganando 0.6% con respecto a la sesión previa.
Mientras los futuros del metal en EE.UU. subieron l% a US$ 1,344.5 la onza.
Cobre
En tanto, el precio del cobre tocó su máximo de tres años por compras de especuladores. Sin embargo, cerró la jornada a la baja, tras publicarse un débil dalo de la economía estadounidense. Los nuevos pedidos de bienes fabricados en EE.UU. anotaron en julio su mayor caída en casi tres años.
En la bolsa de metales de Londres, el cobre alcanzó ayer los US$ 6,970 la tonelada, su mayor nivel desde setiembre del 2014, pero luego corrigió y cayó a US$ 6,901, lo que significó un retroceso diario de 0.2%.
Fondos y especuladores en China están apostando a precios más altos en la medida en que el cobre entra a su novena semana consecutiva de alzas, aunque estas posiciones especulativas dejan a los precios vulnerables a correcciones, según analistas.
Fuente: Gestión