Jorge Rodríguez Rodríguez, Grupo Gloria

Jorge Rodríguez Rodríguez, Grupo Gloria.

“Para ser sostenibles, lo más importante es tratar bien al medio ambiente y a los recursos naturales”

Cementos Yura, una empresa del Grupo Gloria, se ha convertido en un referente regional por su crecimiento y compromiso con la sostenibilidad en una industria desafiante. Con operaciones en cuatro países, la empresa ha consolidado un modelo donde la innovación tecnológica y el respeto por el medio ambiente y comunidades son sus ejes para la sostenibilidad. Este camino ha sido marcado por el liderazgo de su fundador, Jorge Rodríguez Rodríguez, quien en entrevista con ProActivo habló sobre cómo su profundo sentimiento por Arequipa fue la motivación inicial para crecer, dejar un legado en el país, en la región y expandirse con propósito.

“Lo que hacemos tiene varios propósitos: principalmente, satisfacer las necesidades de la sociedad; y segundo, utilizar la tecnología para beneficio de todos, desde clientes y colaboradores hasta la sociedad. Para ser sostenibles, lo más importante es tratar bien al medio ambiente y a los recursos naturales”, afirmó el empresario.

Uno de los avances más relevantes de Yura ha sido la reducción en el uso de clínker, el insumo más contaminante en la producción de cemento. Este esfuerzo no solo ha hecho más eficiente la producción, sino que también ha disminuido significativamente su impacto ambiental.

La sostenibilidad en Yura no se limita a su proceso productivo. La empresa ha impulsado proyectos que transforman residuos en insumos útiles, como el reaprovechamiento de llantas abandonadas. “Creemos que hay muchas oportunidades y lo interesante es hacer que estas sean rentables y que sirvan a la sociedad. A veces no las planificas, se presentan y hay que estar preparados”, comentó Rodríguez.

El crecimiento ha sido una constante en la trayectoria de Yura, con una expansión en el sur de Perú y en otros países, bajo el criterio de sostenibilidad y cuidado ambiental. “Estamos permanentemente creciendo, viendo oportunidades y otro tipo de aventuras”, explicó. Rodríguez aclaró que estas “aventuras” nunca se alejan del propósito de la empresa: “desarrollar actividades que no afecten ni a la sociedad, ni al medio ambiente y menos a las personas, y que generen desarrollo”.

Aunque la compañía tiene un crecimiento constante, Jorge Rodríguez se define como “un arequipeño como los millones que ha habido en toda la existencia de Arequipa, simplemente pensando en cómo mejorar las condiciones de vida, la intelectualidad y el desarrollo social. ¡Hemos tenido éxito y debemos compartirlo!”, dijo emocionado.

El aporte de Yura se refleja en la generación de empleo, el abastecimiento de materiales clave para la infraestructura del país y un enfoque que busca prolongar la vida útil de los recursos naturales. Desde Arequipa, la empresa se proyecta hacia otros mercados manteniendo el objetivo de producir con menor huella ambiental y mayor eficiencia tecnológica.

Mirando hacia el futuro, Rodríguez señala que la empresa seguirá explorando nuevos proyectos alineados con la sostenibilidad y la expansión responsable. “El Perú tiene muchas posibilidades por sus grandes recursos naturales y humanos. Es cuestión de coordinar para que todos remen en la misma dirección y que el país dentro de 10 años pueda ser una sociedad mucho más justa y ordenada”, concluyó.


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