ProActivo | “Ante la crisis generada por el Covid-19, las industrias extractivas pueden jugar un papel dinamizador fundamental para la recuperación económica del país. Y especialmente el sector hidrocarburífero, no solo por su gran aporte a la recaudación fiscal, sino también por su fuerte impacto descentralizador”, sostuvo Pablo de la Flor Belaúnde, director ejecutivo de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE).
De la Flor afirmó que la pandemia ha agravado la producción petrolera, que se ha reducido casi a la mitad de los niveles de principios del año, cuando había tenido cierta recuperación, y que las inversiones en exploración han quedado prácticamente paralizadas.
“La suspensión de operaciones en distintos lotes petroleros, del Oleoducto Norperuano por la conflictividad social, han contribuido a profundizar esa enorme crisis llevándonos al record absurdo de cero producción en Loreto”, ejemplificó al intervenir en Webinar SNMPE: “Gas y Petróleo del Perú: Impulsando el Desarrollo”.
Sin embargo, consideró que la solidez macroeconómica del país está permitiendo enfrentar la crisis con un importante esfuerzo fiscal y monetario, lo que facilitará la recuperación y el crecimiento económico.
“Pero la velocidad de esta reactivación económica dependerá de la capacidad del Estado de movilizar la inversión privada, que es el principal motor de crecimiento productivo y de bienestar en el país”, argumentó.
Destacó que la industria hidrocarburífera ha demostrado, además, que puede desempeñar su papel de reactivador económico, implementando los más exigentes protocolos sanitarios, protegiendo a las comunidades y cuidando el medio ambiente.
Optimismo por el Plan Cierre de Brechas
Remarcó que un hito importantísimo que alienta con optimismo el futuro del sector, es la reciente aprobación del Plan de Cierre de Brechas que permitirá saldar una enorme deuda que el país tiene con la Amazonía y el resto de regiones en materia de acceso a los servicios públicos básicos, como el agua, saneamiento, electrificación, salud y educación, entre otras necesidades vitales.
“El desafío por delante que tiene el Estado, es la ejecución célere de los proyectos ya identificados para cerrar esos enormes déficits en los diversos sectores de desarrollo”, aseguró.
Manifestó que si la implementación de ese plan no se hace con la seriedad que se requiere, “se van a seguir alimentando las enormes frustraciones que en el pasado han servido de caldo cultivo para la conflictividad social que tanto daño le ha hecho a la industria y al país en los últimos años.
Gerens: Sector hidrocarburos jamás dejará de ser importante
El director de Investigación y profesor asociado de EPG Gerens, Arturo Vásquez Cordano, resaltó que según las entidades globales, como la Agencia Internacional de Energía, los hidrocarburos seguirán siendo importante fuente de desarrollo en los próximos 40 años, complementándose con la energía renovable a largo plazo.
“La Industria de hidrocarburos en el Perú no va dejar de ser importante, y va a tener un rol cada vez más preponderante en el suministro energético del país”, aseguró.
Al respecto, manifestó que la cadena de gas natural, es importante porque provee de energía a diferentes sectores, especialmente a la industria; y por el impacto que ha tenido en el transporte donde genera grandes ahorros, y con presencia masiva en Lima, el norte y sur del país, previéndose nuevas concesiones para otras 7 regiones.
Gas natural con 75% en matriz energética
Señaló que desde 1995 hasta el 2017, los hidrocarburos han crecido en importancia, y que a partir del 2010 que se tuvo un 8% de uso de gas natural, se incrementó a casi 11% en el 2017, y con lo cual la economía peruana utiliza el 65% de energía primaria basada en hidrocarburos.
“Según el Ministerio de Energía y Minas, esa participación va a ser mucho más grande, porque el gas natural se proyecta a tener un peso significativo en la matriz energética de hasta un 75% hacia el 2025”, estimó.
Valor agregado de más de US$ 58 mil millones
Dijo que sector hidrocarburos ha tenido una evolución muy marcada, con épocas de bonanza y de moderación, pero siempre con una cuota de 3% al 3.5% de participación del PBI. “El valor agregado que ha generado entre el 2017 y 2019, acumula unos US$ 58,300 millones para la economía peruana”, citó.
Anotó que la inversión petrolera de las empresas en exploración y explotación aumentó desde el 2000, cuando estaba por debajo de los 200 millones, hasta el boom de los precios del petróleo, cuando llegaron a casi 1.880 millones de dólares en el 2002, lo que representó casi 8% de toda la inversión privada del país.
“Toda la inversión en el sector, acumulada desde el 2000 al 2018, suma US$ 16.000 millones de dólares”, completó.
Efecto multiplicador en economía y empleo
También destacó que el efecto multiplicador del sector es trascendente, y que según el INEI y Gerens, por cada sol invertido en el sector se genera en promedio en la economía peruana S/ 1.3 como valor agregado.
“Si tenemos una inversión de 100 millones de soles, el efecto de creación de valor para la economía peruana tendría un adicional de 130 millones de soles”, explicó.
Valioso ahorro por consumo de GLP
Dio a conocer que Gerens ha calculado ahorros significativos por uso del GLP, que además es un combustible más amigable al medio ambiente.
“Desde el 2006 hasta el 2018 se habrían convertido unos 250 mil vehículos a GLP, y que por ello los ahorros para la economía y el sector transporte habrían sido de unos 2,250 entre el 2006-2018 millones de dólares; un aporte del sector hidrocarburos no solamente por la economización de recursos, sino también por el efecto ambiental”, ponderó.
Igualmente, dijo que según el INEI, por cada 52 mil soles de demanda de inversiones en hidrocarburos se genera un empleo directo formal, y otros dos de manera indirecta.
“Y la generación de empleos directos e indirectos sería de 3 empleos por cada 15 mil dólares de inversión”, subrayó.
Impacto en aportes al sector público
Manifestó que por tributos como el impuesto a la renta y las regalías petroleras y gasíferas, el sector aportó al fisco el año 2002 casi S/ 1,100 millones y hasta el año 2013 creció a unos S/ 10 mil millones. “Entre el 2002 al 2019, se habrían acumulado en tributos internos casi 43,400 millones de soles; y 52,350 millones en regalías”, totalizó.
Puntualizó que se trata de casi S/ 100 mil millones de aporte fiscal a la economía peruana; y cuya mitad se ha distribuido en canon y sobrecanon petrolero y gasífero a los gobiernos subnacionales en ese periodo.