Debido a una incompleta red vial, aeropuertos y puertos precarios y una inadecuada generación eléctrica, entre otros aspectos, Perú tiene una brecha deficitaria en infraestructura de 88.000 millones de dólares, de acuerdo a un estudio de las universidades ESAN y del Pacifico, informó el presidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), ingeniero Rómulo Mucho.
“Es una cifra escandalosa, considerando que hace cuatro años, la brecha era 37.000 millones de dólares”, anotó el titular del IIMP al ser investido como el primer Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA), de la región Puno.
Detalló que en infraestructura vial, resulta necesario que la carretera, en tramos, de Tumbes a Tacna, sea de doble vía; como lo tiene Chile hace 20 o 30 años, con más de 5.000 km entre Arica y Punta del Este.
Además, dijo que en materia aeroportuaria el cuadro es igualmente preocupante. “En Arequipa, el aeropuerto internacional Rodríguez Ballón es un problema por su precariedad para abastecer la demanda comercial y de pasajeros”.
Agregó que en la Ciudad Blanca urge abrir el aeropuerto de La Joya, por lo que el gobierno regional debe apurar la construcción de la autopista entre La Joya y Arequipa, para unirlos en 20 minutos de viaje.
Asimismo, dijo que en materia de telecomunicaciones también padecemos de un déficit en conectividad, por falta de un desarrollo energético adecuado, tanto en generación como en trasmisión eléctrica.
Impulso al desarrollo humano
Rómulo Mucho sostuvo que corresponde invertir en infraestructura para el crecimiento sostenido de Perú y pueda alcanzar un adecuado avance en el Índice de Desarrollo Humano (IDH).
Aseguró que si el gobierno invirtiera los 88.000 millones de dólares, “Perú podría entrar en el umbral del primer mundo”.
“Todos podrían beneficiarse del crecimiento del país, pues se crearían más industrias y más empleos”, acotó.
Destacó que el Plan Perú 2040 elaborado por el Colegio de Ingenieros, estima que en ese año, si se sigue creciendo sostenidamente, Perú debe alcanzar un elevado IDH, ubicándose entre las naciones líderes en equidad y en conservación ambiental.
Sin embargo, estimó que hacia el 2021 ya debe darse un salto en ese camino, pues se calcula que el PBI debe haber duplicado y alcanzado los 346.000 millones de dólares.
Más proveedores locales
El ex viceministro señaló que es necesario que la minería genere nuevos proveedores, mayormente nacionales, para lo cual se necesita que tengan buena capacitación y estén provistos de tecnología.
“Chile desarrolla el programa Proveedores de Clase Mundial y ya tiene 140 empresas que son proveedores de (empresas mineras) de Australia y Canadá, países del primer mundo”, ejemplificó.
Consideró que en la búsqueda de la prosperidad sostenible, se debe aprovechar eficientemente los beneficios que reporta la actividad minera en el país.
“La minería algún día se acabará, ahora estamos en el cenit, pero debemos aprovecharla al máximo y que esa ganancia sirva para potenciar clusters, conocimiento y agroindustria”, planteó.
Aporte minero a Puno
En otro momento, Mucho dio a conocer que del total del aporte que realiza el sector minero al país, Puno solo recibe S/. 363 millones, lo que representa el 6.6%, ubicándose como la región que menos recursos obtiene por la actividad extractiva en el sur del Perú. Mientras, Arequipa recibe S/. 802 millones (14.5%), Moquegua S/. 392 millones (7.1%), Cusco S/. 380 (6.9%) y Tacna S/. 369 millones (6.7%).
Llamado a puneños
El académico hizo un llamado al gobierno central y a las empresas mineras a insistir en el diálogo con los alcaldes distritales y comunidades mineras de Puno para que faciliten el desarrollo de los proyectos mineros en dicha región, como es el caso de Corani. “Les he dicho a los presidentes de comunidades ¡dejen de ser pobres! y hagan viable ese proyecto, que son 500 millones de dólares de inversión y que desarrollarán servicios de energía, carreteras, entre otros, en la zona”, refirió.
Aseguró que en la zona puneña de San Antonio, en la cordillera andina oriental, donde surgió Palca, una de las primeras minas de plata del Perú, existen más recursos minerales, que se necesita explorar.
“Los alcaldes y comuneros involucrados deben tomar conciencia de la riqueza que tienen y permitir que se exploren y exploten esos recursos”, recalcó.