ProActivo | Roque Benavides Ganoza, presidente de Compañía de Minas Buenaventura, analiza las proyecciones del gobierno para la reactivación económica del Perú a propósito del reciente discurso del presidente de la República, Pedro Castillo y detalla qué se espera desde el sector minero del nuevo gobierno.
Según cifras del MEF, en Perú, hasta antes de la pandemia, la informalidad laboral fluctuaba entre 70 a 75%. Un aspecto tomado en cuenta por el empresario quien observó que el país requiere facilitar la inversión, promoviendo la construcción de nuevos proyectos mineros que reactiven rápidamente la economía nacional.
“(La reactivación económica) no se logra con más impuestos a la actividad minera, sino alentando la construcción de esos nuevos proyectos que pueden reactivar rápidamente la economía nacional, y del cual en su reciente discurso el presidente de la República tendría que haber hablado, pero ni lo mencionó”, afirmó Roque Benavides, presidente de Compañía de Minas Buenaventura, en declaraciones recogidas por ProActivo, en el marco de la Conferencia Internacional: “Perspectivas económicas y de inversión con el nuevo gobierno”, organizado por la Cámara de Comercio Canadá Perú.
Benavides subrayó que se requiere del impulso y la facilitación de la inversión para cristalizar los proyectos mineros existentes en cartera, y que representan un costo estimado en 60 mil millones de dólares.
Perú es un importante productor de oro; que junto con Chile produce el 40% del cobre del mundo y tiene un mayor número de proyectos cupríferos que Chile, Australia o Canadá. Asimismo, en genera grandes contribuciones económicas por lo que, comparado con Australia, Canadá, México y Chile, es el que más impuestos paga.
El presidente de Buenaventura aclaró también que se habla mucho ‘los precios nos acompañan, principalmente el precio del cobre’ y en ese sentido, puntualizó que tienen que ponerse en valor el potencial minero porque en el subsuelo no son riqueza mientras no haya inversión. “Para sacar adelante a Quellaveco hay que invertir 5 mil 500 millones de dólares; y recién en ese momento comenzaremos a producir un gramo de cobre”, explicó.
La minería es descentralizadora
“La competitividad geológica de nuestro territorio sigue siendo muy alta porque el Perú ha sido bendecido con inmensos recursos naturales”, manifestó.
Advirtió que generar nuevos impuestos reduciría la competitividad minera del Perú, que ya está golpeada por la falta de infraestructura y de concertación entre los sectores público, privado y la sociedad civil, en las zonas donde hay desarrollos mineros.
“La minería es una actividad integradora y descentralizadora, genera puestos de trabajos, servicios y compras locales en las zonas donde opera. Desarrolla infraestructura, justifica la construcción de vías de comunicación, electrificación, comunicaciones, recursos hídricos, educación y salud que tanto necesitamos y pide nuestra gente”, detalló.
El potencial minero es enorme, el Perú tiene algo así como el 14% de su territorio concesionado para efectos de prospección minera pero solamente el 1.3% del territorio del Perú tiene operaciones y actividad minera, tanto en exploración como en producción.
Sur y norte de Perú
“Perú cuenta en el sur del Perú con proyectos como Tía María, Zafranal, Pampa del Pongo, San Gabriel y Mina Justa. Todo eso reactivaría enormemente la economía del sur. Lo que ha hecho Cerro Verde, Constancia e inclusive Las Bambas sobre la economía de Arequipa, es impresionante”, manifestó.
Dijo que Arequipa es la región que más crece en el Perú, producto del desarrollo de la agricultura y el turismo, “pero el desarrollo de los proyectos mineros ha sido fundamental para su reactivación económica”. Mientras que, en el norte, el país tiene la posibilidad de poner en producción Michiquillay, El Galeno, Conga, los Sulfuros de Yanacocha, La Zanja, Tantahuatay y La Granja.
“Nada sacamos diciendo, ‘Tía María no va’ o ‘Conga no va’. Esos son dogmas que tenemos que erradicar en nuestro país”, expresó. En cambio, consideró, sí es necesario enfocarse en los desarrollos regional y nacional, bajo los criterios de “valor compartido”.
La industria minera y el Estado
“En la industria minera tenemos que trabajar unidos con el Estado, que debe definir reglas y acelerar procesos, como el de la permisología, que es de locura. En el Perú, la minería tiene que generar entornos favorables y con el Estado proveer de servicios básicos y asegurar beneficios a las poblaciones de su entorno”, puntualizó.
¿Qué esperar del nuevo gobierno?
Roque Benavides detalló lo que desde el sector minero se espera del nuevo gobierno: Respeto a las reglas de juego institucionales y a las instituciones democráticas; continuar con la atención a la crisis sanitaria y mejorar el sistema de salud; reactivar la economía generando confianza a las empresas, con predictibilidad.
Asimismo, dijo que hay expectativa en la generación de empleo de manera sostenida y recuperación de las pérdidas generadas durante la crisis. Hizo hincapié que los cambios radicales ahuyentarían la inversión.
Del mismo modo destacó la importancia de descentralizar al país, porque muchas partes el Perú, especialmente la sierra sur del Perú, se siente abandonada, al igual que otros lugares. “No podemos seguir pensando que Lima es todo, no podemos vivir de espaldas a la sierra a la selva al área rural que tanto necesita de infraestructura”, declaró.
Además, pidió al gobierno la educación presencial y a distancia. En especial en las zonas donde los niños no tienen computadoras, ni internet; y donde se propuso que los niños estudien en climas hostiles y a la intemperie, para captar señal.