La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) ha generado debate tras anunciar modificaciones en la regulación del seguro de desgravamen, un producto vinculado a los créditos bancarios. Fabiola García, coordinadora ejecutiva del Departamento de Regulación de la SBS, explicó los alcances de estos cambios, que entrarán en vigencia en septiembre de 2024, y aclaró dudas sobre su impacto en los deudores y sus herederos.
La principal novedad es que los usuarios podrán decidir si contratan o no el seguro de desgravamen en créditos de consumo, como tarjetas de crédito, préstamos personales o vehiculares. Sin embargo, este seguro seguirá siendo obligatorio en créditos hipotecarios, dado el mayor riesgo financiero que representan.
García aclaró que el seguro de desgravamen no es obligatorio por ley (a diferencia del SOAT), pero muchas entidades financieras lo exigían como requisito para aprobar un crédito. Con la nueva regulación, los bancos deberán ofrecer alternativas sin este seguro en los productos mencionados.
¿Si no contrato el seguro y fallezco, mis herederos pagan la deuda?
Uno de los mayores temores entre los usuarios es si, al no tener seguro de desgravamen, sus deudas pasarían automáticamente a sus herederos. La SBS fue enfática en aclarar que:
- El régimen sucesorio peruano (Código Civil de 1984) establece que las deudas se pagan con el patrimonio del fallecido, no con los bienes personales de los herederos.
- Si no hay suficientes bienes en la herencia, la deuda no se transfiere a los familiares.
- Los bancos solo pueden reclamar el pago con los bienes dejados por el difunto, nunca con los recursos propios de los herederos.
En el caso de créditos vehiculares, si no hay seguro de desgravamen, el banco puede liquidar el vehículo para cubrir la deuda. En tarjetas de crédito, los usuarios podrán evaluar si el costo del seguro justifica la protección, especialmente en deudas de corto plazo.
¿Cómo se adaptarán los bancos?
Las entidades financieras tienen hasta septiembre para ajustarse a la norma. Según García, podrían:
- Reestructurar contratos vigentes para quienes deseen eliminar el seguro.
- Lanzar nuevos productos sin seguro de desgravamen como opción.
- Mantenerlo como requisito en créditos hipotecarios, donde el riesgo es mayor.
Sobre el control político de las cajas municipales
Otro tema abordado fue la preocupación por un proyecto del Congreso que busca modificar la designación de directorios en cajas municipales, permitiendo la participación de exfuncionarios públicos, incluidos excongresistas.
La SBS señaló que no fue consultada sobre esta iniciativa y recordó que la Ley General del Sistema Financiero ya impide que autoridades en ejercicio integren directorios de estas entidades. Además, anunció que prepara una reforma de gobierno corporativo para fortalecer la transparencia y la idoneidad en la gestión de las cajas.
Mayor libertad, pero con responsabilidad
Los cambios en el seguro de desgravamen buscan dar más opciones a los usuarios, pero también exigen mayor conciencia financiera. Quienes decidan no contratarlo deberán evaluar los riesgos, especialmente en créditos a largo plazo.
Por otro lado, la SBS mantiene su compromiso de supervisar el sistema financiero, evitando injerencias políticas en cajas municipales y garantizando que las deudas no se conviertan en una carga injusta para las familias.
En los próximos meses, se espera mayor claridad sobre cómo los bancos implementarán estas modificaciones y qué nuevas medidas tomará la SBS para proteger a los consumidores.